Albares pide al PP que se deje de «demagogia» respecto a las aduanas con Marruecos y permita trabajar al Gobierno
El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha reclamado este lunes al PP que deje de lado la «demagogia» en lo relativo a la apertura de las aduanas de Ceuta y Melilla acordadas con Marruecos y que deje trabajar al Gobierno.
Albares ha defendido que existe «un acuerdo a nivel político que está totalmente garantizado entre los dos gobiernos» para la reapertura de la aduana de Melilla, cerrada unilateralmente por Marruecos en agosto de 2018, y la apertura de una nueva en Ceuta.
El ministro ha justificado el que aún no se haya producido la apertura de ambas a que aún hay «trabajo técnico» por parte de los servicios aduaneros de los dos países, después de que en el caso de Melilla sí que por primera vez se produjo el cruce de un primer camión con mercancías el pasado 15 de enero en el marco de lo tildó de una «primera fase» de cara a la normalización.
«En estos mismos momentos las aduanas se están hablando para solventar esos problemas técnicos y que el día que arranque eso ya no tenga vuelta atrás», ha puntualizado.
Así las cosas, Albares ha expresado una vez más su sorpresa con el hecho de que pese a que nunca antes nadie había planteado la apertura de una aduana en Ceuta ahora se quiera exigir al Gobierno que esto se produzca cuanto antes.
NADIE MOVIÓ UN DEDO POR LA ADUANA EN CEUTA
«Nadie movió un dedo por ello, a nadie le extrañó y cuando nosotros por primera vez en la historia lo ponemos encima de la mesa a todo el mundo le parece que vamos tarde», ha afeado, refiriéndose aunque sin citarlo al PP, que se ha mostrado muy crítico respecto a esta cuestión. Por ello, ha pedido a los populares «menos demagogia» y que «en vez de hacer que hacen que nos dejen trabajar a los que hacemos de verdad».
Una vez más, ha insistido en que la relación con Marruecos está «en el mejor momento de la historia», con un volumen de comercio que alcanzó los 24.000 millones de euros, solo por detrás de Estados Unidos y Reino Unido, y con una «cooperación ejemplar envidiada por los socios europeos tanto en el control de los flujos migratorios irregulares» como en la lucha contra el terrorismo».
«En política exterior hay pocas leyes por decirlo de alguna forma pero si hay una ley es que uno debe de tener las mejores relaciones con los vecinos con los que tiene una frontera terrestre», ha incidido.
RELACIÓN CON ARGELIA
Albares también se ha referido a Argelia. «Las relaciones diplomáticas están totalmente normalizadas», ha esgrimido, recordando que el embajador argelino regresó a Madrid hace más de un año y el español en Argel nunca abandonó su puesto.
«Las relaciones económicas se han retomado y va muy bien», ha añadido, en referencia al hecho de que Argelia decidió el pasado mes de noviembre el bloqueo que había de las operaciones comerciales con España a raíz de la crisis diplomática por el apoyo del Gobierno al plan de autonomía marroquí para el Sáhara.
«Lo que nosotros queremos con Argelia, igual que con el resto de los países del Magreb, es tener las mejores relaciones», ha zanjado, en línea con el argumento que ha venido esgrimiendo en todo momento en relación con esta cuestión.