Cantabria supera en 2024 los 7.000 accidentes laborales, el mayor número de los últimos 14 años
UGT considera «terribles» unas cifras que reafirman «una tendencia negativa de un problema laboral que trasciende a toda la sociedad»
Cantabria registró en 2024 un total de 7.088 accidentes de trabajo (6.250 en jornada de trabajo y 838 en el desplazamiento al centro de trabajo o In Itinere), lo que implica el segundo año consecutivo por encima de los 7.000 siniestros y el mayor número desde el 2009, según el último avance estadístico del mes de diciembre y del cierre del año del ICASST (Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo) recopilado por UGT-Salud Laboral.
En un comunicado, el sindicato ha precisado que, salvo el atípico año 2022 donde hubo más de 9.000 accidentes laborales por más de 3.600 leves por contagios del Covid en el personal socio sanitario, el máximo de los 7.000 siniestros laborales anuales en Cantabria se rebasó por primera vez en 14 años en 2023 con 7.059 y el año pasado incluso se superó con 29 más.
Las estadísticas del ICASST confirman además que en 2024 creció especialmente la accidentalidad grave, con casi medio centenar de siniestros de este tipo, el mayor número en Cantabria desde 2016.
En concreto, en 2024 fallecieron 11 trabajadores en accidente de trabajo (tres menos que en 2023, cuando se registró el mayor número de siniestros mortales desde 2010), lo que reafirma cinco años consecutivos con más de un decena de muertes anules en el trabajo en Cantabria.
El responsable de Salud Laboral de UGT en Cantabria, Marcos Flores, ha lamentado que la comunidad vuelve a los 7.000 accidentes laborales al año «y por quinto año consecutivo se registra más de una decena de muertes en el trabajo. En 2024 se volvió a rebasar la cifra del medio centenar de siniestros graves, lo que no sucedía en los ocho últimos años», ha señalado.
En opinión de Flores, en 2024 «simplemente se ha confirmado una tendencia negativa» de un problema laboral que trasciende a toda la sociedad y «con unas cifras terribles que no podemos normalizar porque corresponden a personas que van a trabajar y sufren lesiones que pueden llegarles a costar incluso la muerte».
«Falta cultura preventiva en las empresas, lo que se traduce en un incumplimiento sistemático de la normativa legal y la imperiosa necesidad de que la Administración dote de los medios necesarios a los organismos que tienen que velar por su cumplimiento para que puedan desarrollar su cometido», ha subrayado el sindicalista, tras reiterar que «si no se cumplen las normas de prevención, no acabaremos con esta lacra social».