Colombia insiste en que su presencia en la investidura de Maduro no implica reconocer las elecciones
El ministro de Asuntos Exteriores de Colombia, Luis Gilberto Murillo, ha incidido este lunes nuevamente en que la presencia del embajador en Caracas en la toma de posesión de Nicolás Maduro no significa el reconocimiento de los resultados oficiales de las elecciones del pasado 28 de julio en Venezuela.
«Colombia no reconoce los resultados en Venezuela», ha zanjado Murillo, quien ha explicado que «sin actas públicas y transparentes» el Gobierno del presidente Gustavo Petro no puede avalar ese proceso electoral.
Así, ha señalado al mismo tiempo la necesidad de mantener vías de comunicación con las autoridades venezolanas en beneficio de ambos pueblos y de ahí que acudiera al acto Milton Rengifo. «Es el embajador, tiene que hacer presencia», ha dicho.
«Tenemos una relación de Estado a Estado y de ninguna manera esto significa el reconocimiento de los resultados electorales ni del Gobierno. Eso se estila obviamente en la relación diplomática», ha dicho en una entrevista para Blu Radio.
En ese sentido, ha destacado que reanudar las relaciones con Venezuela después de los años en los que estuvieron rotas durante la administración de Iván Duque ha traído un impacto positivo en ambas economías y en materia de seguridad.
«Desde la reapertura, el comercio bilateral ha crecido, pasando de cero a más de 1.200 millones de dólares en intercambio comercial. Además, se ha registrado una notable disminución en las tasas de homicidio en Cúcuta», ha contado.
Así, ha explicado que «cualquier manejo imprudente» en las relaciones con Venezuela puede «desencadenar un aumento de la actividad criminal en la frontera», lugar en el que operan algunos grupos armados con los que el Gobierno negocia la paz. «Mantener el diálogo es una cuestión de seguridad nacional», ha remarcado.
«No podemos permitir que decisiones precipitadas afecten a quienes dependen de una relación estable entre los dos países», ha dicho Murillo, quien ha puesto en valor la «responsable y prudente» postura del Gobierno en asuntos de política exterior. «No se mide solo por los principios, sino también por su capacidad de proteger a los ciudadanos y fomentar el desarrollo», ha concluido.
En las últimas horas, el presidente Petro ha acudido a sus redes sociales para volver a defender su idea de no romper relaciones diplomáticas con Venezuela, tal y como vienen exigiendo con especial énfasis en las últimas semanas algunos sectores de la oposición de su país.
«Buscamos un dialogo democrático en Colombia y en Venezuela, buscamos el respeto de los pueblos. Denunciamos la violación de sus derechos fundamentales tanto en Colombia como en Venezuela o en cualquier lugar del mundo», ha escrito en X.
«Mantendremos las relaciones diplomáticas», ha dicho Petro, a pesar de que las elecciones «no fueron libres desde un comienzo» porque no se levantaron las sanciones «para que el pueblo votará en libertad» y el Gobierno venezolano quitó «el derecho de elegir» y a la opositora María Corina Machado «a ser elegida».
«Por eso no hubo elecciones libres en Venezuela y deben haberlas. Las relaciones diplomáticas son para que los pueblos se unan y no sufran por las desaveniencias de sus gobiernos», ha zanjado.