Irene Montero condiciona la posibilidad de volver a gobernar con el PSOE a «reparar el daño» infringido a su formación


Cree que los socialistas han tratado de acabar con ellos y recalca que su futuro político lo decidirá la militancia morada

La número dos de Podemos, Irene Montero, ha subrayado que su futuro político siempre lo decidirá la militancia y que su formación podría volver a gobernar con el PSOE si se cumplen dos máximas: mantener una relación de cooperación, no de subordinación, y «hacerse cargo de reparar el daño» que les ha infringido impulsando «operaciones políticas» para intentar acabar con la izquierda alternativa.

En declaraciones a RNE, recogidas por Europa Press, ha desgranado también que proceder a ilegalizar a organizaciones como Desokupa es una de las condiciones para que Podemos apoye nuevos Presupuestos Generales del Estado (PGE), junto a romper relaciones con Israel, bajar un 40% el precio del alquiler por ley y prohibir la compraventa de vivienda a extranjeros en zonas tensionadas.

Además, en la parcela de vivienda ha acusado a PSOE y PP de defender los mismos intereses, los de los rentistas y grandes propietarios, y defiende que para aumentar el parque público de viviendas hay que contar con millones de pisos. Y en este sentido ha reclamado que se expropie el uso de la mitad de los inmuebles en manos de los fondos de inversión, para así destinarlos a alquiler social.

La exministra de Igualdad ha destacado que Podemos ha pasado por momentos difíciles, tras una década en la que han sido golpeados por la «progresía» política y mediática, pero tiene claro su apuesta política, ser la herramienta para levantar a la izquierda alternativa.

Respecto a su papel y con el telón de fondo de las recientes las palabras de la líder de Podemos, Ione Belarra, en las que dijo que pronto volvería al Congreso, Montero ha desgranado que su tarea ahora es representar a su país en el Parlamento Europeo y en «poner el cuerpo y el alma» en rearmar a la izquierda alternativa. «Estaré donde diga la militancias (…) los siguientes pasos lo decidirá la militancia», ha remachado.

NO PUEDE HABER UN GOBIERNO DONDE SOLO MANDE SÁNCHEZ

La eurodiputada morada ha reivindicado que la izquierda debe estar fuerte y no «subordinarse» al PSOE, como a su juicio ocurre ahora (aludiendo de forma implícita a Sumar) en un Gobierno de coalición en el que solo manda el presidente, Pedro Sánchez.

A su vez, ha subrayado que Podemos es «fuerza de gobierno», como demostró la anterior legislatura, y la clave para que se den avances sociales mientras recrimina que el actual Ejecutivo no lo hace.

Así, ha desgranado que en España se necesita «las unas a las otras», en referencia a las distintos partidos de izquierda, pero debe ser con una «relación de cooperación y no de subordinación».

No obstante, ha criticado que en España la «progresía política y el PSOE» han dedicado más esfuerzos a «acabar» con la izquierda alternativa que con la derecha.

Pese a ello, se abre a futuros pactos de gobernabilidad con el PSOE si dan los votos para ello, si hay relación de cooperación y si también el Partido Socialista se hace cargo de reparar el daño que ha hecho impulsando operaciones políticas que han intentado acabar con su izquierda y subordinarla».

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