Fedea plantea una indexación parcial de las pensiones al IPC para asegurar la sostenibilidad del sistema
De la Fuente reitera la necesidad de aprobar un recargo en el IRPF para pagar las pensiones
Fedea plantea una indexación parcial de las pensiones al Índice de Precios de Consumo (IPC), de manera que las pensiones más altas, no así las más bajas a las que no se les puede recortar, pudieran acumular a lo largo de los años una pérdida de poder adquisitivo topado para reducir el gasto en pensiones y asegurar la sostenibilidad de las mismas.
Esta es una de las medidas que el director ejecutivo de Fedea, Ángel De la Fuente, ha defendido durante la conferencia inaugural del Congreso Nacional de Economistas y Auditores celebrado este jueves en Madrid.
Tras la última reforma de pensiones, el IPC es el indicador que marca la subida de la cuantía de las pensiones contributivas. De esta manera, el IPC interanual promedio de doce meses (de diciembre del año anterior a noviembre del ejercicio en vigor) es el que determina la subida de estas prestaciones.
Este jueves se conocía que las pensiones contributivas subirán en 2025 en torno a un 2,8%, tras conocerse que el dato de IPC adelanto de noviembre avanzaba un 2,4% en tasa interanual, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Para De la Fuente, este sistema que se recuperó con la última reforma de pensiones «va en la dirección equivocada», ya que acerca peligrosamente la pensión media al salario medio y en el caso de las nuevas pensiones medias del régimen general incluso se sitúan por encima del salario medio. «Cuando los jubilados cobran más que los trabajadores en activo es peligroso», ha avisado.
No obstante, el experto de Fedea no cree que el sistema de pensiones «vaya a quebrar», sino que se corre el riesgo de que se acabe destinando mucho dinero de las cuentas del Estado para atender a la brecha que existe entre los ingresos por cotizaciones –lo que se utiliza para pagar las pensiones– y los gastos de estas prestaciones, provocando una pérdida de inversiones futuras o desatendiendo otras inversiones, como la educación.
«Cada trabajador ocupado tiene que contribuir con 2.500 euros para tapar o cerrar la brecha de la Seguridad Social y similares. Es bastante dinero y será más en el futuro», ha advertido el experto
De igual manera, De la Fuente ha recalcado que el sistema de pensiones español es mucho más «generoso» que los del entorno, ya que la jubilación en España supone cerca del 80% del sueldo de un trabajador en activo, mientras que en países como Alemania es un 45%, aunque ha matizado que aquí juega un papel importante el hecho de que los sueldos en España son más bajos que en Alemania, lo que repercute también en la cuantía de la pensión.
PROPONE INDEXAR LA JUBILACIÓN A LA ESPERANZA DE VIDA
En esta misma línea, otra de las propuestas planteadas por el experto de Fedea consiste en la indexación de la edad de jubilación a la esperanza de vida, porque «si cada vez vivimos más años, tendremos que trabajar más».
De igual manera, De la Fuente ha abogado por eliminar la opción que da el sistema actual de pensiones de eliminar los peores meses de la vida laboral para calcular la pensión, con el objetivo de que se vuelva a usar la vida laboral completa, y recuperar la idea de controlar el crecimiento del gasto de la pensión, tanto de los pensionistas actuales como futuros, así como avanzar hacia un sistema de pensiones tipo sueco o de cuentas nocionales.
APORTAR RECURSOS DEL ESTADO A LAS PENSIONES Y RECARGO DEL IRPF
No obstante, el experto ha reconocido que habrá que poner recursos adicionales del Estado hasta el año 2050, coincidiendo con los años en los que entrarán en el sistema de pensiones la generación del baby boom , pero ha pedido que sea «equitativo y lo más transparente posible».
En esta línea, ha propuesto que la inyección de esta financiación para pagar las pensiones del futuro venga de un recargo sobre la tarifa estatal del IRPF, que es el impuesto más justo que tiene el sistema tributario español porque «lo pagamos todos».
