Desarrollan una técnica basada en sensores cuánticos que permite detectar enfermedades antes de que muestren síntomas
El grupo Quantum Technologies de la Universidad de Murcia (UMU), que dirige el físico Javier Prior, ha logrado introducir dentro de células humanas nanodiamantes con sensores cuánticos que detectarán anomalías celulares y actuarán como chivatos de la enfermedad antes de que el paciente sufra los síntomas de la patología.
Este hito en el campo de la física cuántica ha sido posible gracias al apoyo financiero de la Agencia Estatal de Investigación (AEI), organismo dependiente del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (MICIU), que ha aportado al programa 836.939,97 euros a través de distintas convocatorias, tales como Proyectos de Generación de Conocimiento, Proyectos de Colaboración Internacional de la iniciativa Quantera y otros.
Según ha explicado el físico de la UMU, la plataforma que han desarrollado consiste en el control del electrón de un átomo de nitrógeno implantado en el interior de un diamante. Esta plataforma, conocida como centros NV (Nitrógeno-Vacante), presenta como ventajas una capacidad de operar a temperatura ambiente, robustez y bio- compatibilidad, lo que permite utilizarla en el interior de organismos vivos.
El control de esta plataforma permitirá a España posicionarse en el desarrollo de las tecnologías cuánticas y sus aplicaciones, principalmente en el campo de la salud porque «los sensores cuánticos están revolucionado la medicina», tal y como ha asegurado el investigador de la UMU.
«En estos momentos trabajamos en el desarrollo de Resonadores Magnéticos Nucleares a escala nanométrica, lo que nos permitirá detectar la presencia de moléculas individuales que no deberían estar en el organismo y que actuarán como chivatos de la enfermedad», ha señalado Prior.
EMPRESA TECNOLÓGICA QLAB
El equipo de Prior se encuentra además en negociaciones para fundar la empresa Qlab, que desarrollará otro concepto de sensor cuántico conocido como Lab-in-chip . Esta tecnología consistiría en minidispositivos con funciones de laboratorio capaces de analizar con los mismos principios cuánticos una muestra de microfluido corporal y que podría llegar a ser doméstico.
En este caso, al diamante se le practicaría una especie de canal de 100 nanómetros para canalizar las micromuestras y podría arrojar un preciso resultado similar a un análisis de sangre o una biopsia. Su aplicación en un organismo podría ser mediante implantación, inyección o simplemente, en el caso del cerebro, con un casco que lo cubra y mida los campos eléctricos de las neuronas.
Prior avanza también que actualmente están valorando ofertas de participación en su proyecto empresarial de inversores públicos y privados, tanto nacionales como internacionales, para poner en marcha esta tecnológica dedicada a los sensores cuánticos con usos clínicos.