Más Madrid busca usar a Arenillas de cortafuegos del caso Errejón , descarta dimisiones y niega conocer más casos
Ella adelanta lucha contra el partido ante el «acoso» de la dirección del partido y no descarta abrir un frente judicial
Más Madrid busca usar a la diputada de la Asamblea Loreto Arenillas de cortafuegos del caso Errejón al tiempo que descarta dimisiones y niega conocer más casos de presuntos abusos sexuales por parte del exportavoz de Sumar en el Congreso Íñigo Errejón.
Así busca afrontar la formación el tsunami que desde el pasado jueves le golpeaba, especialmente tras viralizarse en redes sociales acusaciones a Arenillas de haber intentado «mediar» con una de las presuntas víctimas del portavoz.
«Si hubiésemos sabido que era un agresor, créanme, que no le hubiésemos recomendado ayuda profesional. Hubiéramos ido directamente a una comisaría», lanzaba este lunes la ministra de Sanidad, Mónica García, en la rueda de prensa que el partido ofrecía el lunes tras tres días de hermetismo, un comunicado y otro de vuelta de Arenillas.
Frente a una sala llena de periodistas comparecían visiblemente afectadas García y las portavoces de Más Madrid en el Ayuntamiento y la Asamblea, Rita Maestre y Manuela Bergerot. «Esto no va de neoliberalismo, esto no va de subjetividad tóxica o de estar en primera línea política. Esto va de agresiones sexuales y de machismo», respondía García a la carta con la que Errejón anunciaba su cese.
Más Madrid sacaba pecho de haber exigido su dimisión desde que Errejón reconociera los hechos sucedidos la pasada semana, al tiempo que ponía «a disposición de cualquier víctima» de Errejón sus mecanismos de «denuncia e investigación».
MÁS MADRID NO CONOCÍA LOS HECHOS
Las coportavoces repitieron insistentemente que Más Madrid no había recibido «ninguna denuncia, ningún testimonio concreto, ni presente ni pasado, contra Errejón», pero Arenillas ya había situado en la diana a Manuela Bergerot.
Tras el comunicado del viernes, donde anunciaban su cese, Arenillas emitía el suyo acusando a Más Madrid de usarla de «chivo expiatorio» y de no respetar su «presunción de inocencia». Negaba haber intentado tapar ningún caso y disparaba contra Manuela Bergerot –entonces secretaria de Organización– asegurando que le expuso lo sucedido y que fue ella la que no consideró que tuviera importancia.
Este lunes se le preguntaba a la formación si habría más dimisiones. «No», respondía tajante Mónica, mientras que Bergerot defendía que su formación había sido y será «implacables, sea quien sea el agresor». Reivindicaba las actuaciones que habían llevado a la dimisión de Errejón y al cese de Arenillas.
«Nos enteramos por redes sociales (…) Al día siguiente pedimos explicaciones a Loreto Arenillas y nos informó que había contactado por su cuenta con la víctima», insistía Bergerot. Indicó que las explicaciones de Arenillas fueron «insuficientes» y aseguró que el episodio de Castellón era el «único caso de esta índole» del que era consciente.
Maestre relataba cómo tuvieron constancia de que Errejón «había tocado el culo a una mujer en un concierto» y que una «excompañera del partido que estaba allí presente intervino motu propio a espaldas de la organización, a espaldas de la ejecutiva y a espaldas del partido».
ARENILLAS NIEGA LAS ACUSACIONES Y CONTRAATACA
Arenillas no tardaba en contraatacar. Unos minutos tras la rueda de prensa en la que se le adjudicaban las responsabilidades políticas compartía un nuevo comunicado en sus redes sociales.
Adelantaba que denunciará ante el Comité de Garantías de Más Madrid el «abuso de poder» que cree que ha desplegado la Ejecutiva contra ella y no descarta acudir a los tribunales.
«En las próximas horas presentaré una denuncia formal por vulneración grave de los estatutos ante la Comisión de Garantías de Mas Madrid, que espero se active con rapidez y trabaje con independencia, sin renunciar a acudir a los tribunales», trasladaba Loreto Arenillas, quien afirmó que el viernes la dirección del partido difundió «información falsa» sobre su comportamiento que se habría replicado en la rueda de prensa del este lunes.
Exigió su derecho a la defensa ante el «abuso de autoridad» de la dirección porque la «suspensión cautelar» de las responsabilidades orgánicas en la formación –responsable de Coordinación– mientras se investigan los hechos o la exigencia de un acta «debe requerirla el comité de garantías, el único con competencias para hacerlo». «Las coportavoces, el equipo de coordinación o la dirección del grupo parlamentario no tienen esta competencia», remarcaba.
Aseguraba que «lejos de encubrir» ella informó, ha vuelto a señalar a Manuela Bergerot y ha ampliado el círculo de personas que tenían conocimiento del caso a otros miembros de la dirección del partido. «Como las portavoces han reconocido en la rueda de prensa de hoy, no tienen constancia de ningún encubrimiento porque no lo ha habido», lanzaba.
NO ENTREGA SU ACTA
Bergerot aseguraba este lunes que Arenillas no había entregado aún su acta de diputada porque anunciaba su intención de hacerlo la noche del viernes y que la Asamblea estaba cerrada. Este lunes tampoco lo hizo, como aseguraron a Europa Press fuentes parlamentarias.
Se abre así la incógnita alrededor de lo que hará la todavía parlamentaria regional. Una de las opciones sería que pasara a ser diputada no adscrita, lo que supondría que Más Madrid perdiese un escaño, el consiguiente dinero asociado y también el liderazgo de la oposición a la presidenta autonómica, Isabel Díaz Ayuso, en favor del PSOE.
Más Madrid y los socialistas quedaron empatados a escaños en los comicios de 2023 –27–, pero en votos ganaron los liderados entonces por Mónica García. Al pasar a condición de no adscrita Arenillas, el asiento frente a Ayuso dejaría de corresponderle a Bergerot para pasar al líder de los socialistas, Juan Lobato.
Según recoge el Reglamento de la Asamblea, consultado por Europa Press, Arenillas podría pasar a ser no adscrita por decisión propia o al ser expulsada del Grupo Parlamentario. Mantendría su condición de parlamentaria hasta las próximas elecciones autonómicas.
La Mesa de la Asamblea deberá decidir el procedimiento para que los no adscritos intervengan en el Pleno lo las comisiones de la Asamblea, teniendo que respetar en todo caso su derecho a formar parte al menos de una comisión.