Maestre confiesa estar «engañada» por Errejón, un «misógino» que parecía «buen novio», y pide acabar con el machismo
«Ni he sido parte ni tengo constancia de ningún encubrimiento de ninguna agresión ni acción violenta», subraya
La líder de Más Madrid en el Ayuntamiento y coportavoz de la formación política, Rita Maestre, ha confesado sentirse «engañada» por un «misógino» como Íñigo Errejón, que parecía «un buen novio», y ha hecho un llamamiento a erradicar las conductas machistas, «caiga quien caiga».
Maestre traslada su «respeto y apoyo» a todas las mujeres en un comunicado en el que se abre a hablar en público de su vida personal dado que desde hace días una parte de ella ha quedado expuesta. «Como todo el mundo sabe, Íñigo Errejón y yo fuimos pareja durante varios años y, aunque llevábamos mucho tiempo distanciados, todo lo que ha ido trascendiendo esta semana me abruma y conmociona especialmente», describe.
Ahora está descubriendo «algunos de los episodios de comportamientos y violencia misógina denunciados por las víctimas», que sucedieron cuando «el agresor» y ella eran pareja. «Era una persona de apariencia normal, un buen novio , pero era a la vez un misógino que volvía a casa con normalidad después de agredir a una mujer de 20 años en un hotel», ha condenado.
El feminismo ha enseñado, continúa Rita Maestre, que los agresores, «que se suelen presentar como seres monstruosos excepcionales, son un padre, un hermano, un compañero de trabajo o tu expareja». «Pero es sobrecogedor porque ahora no es una teoría ni un lema, es mi vida», ha constatado.
«UN MANIPULADOR»
También ha querido contestar «a quienes hoy especulan alegremente con el grado de conocimiento de sus acciones o complicidad en los espacios de convivencia personal o política de los que formaba parte».
«Evidentemente es imposible que cada una de las personas que hemos compartido con él parcelas de nuestra vida, en el ámbito que sea, no pensemos cómo no pudimos ver que estábamos ante alguien con esas múltiples caras, cómo pudimos cegarnos ante ese nivel de manipulación. Porque eso es lo que es quien sostiene en su día a día una red de agresiones y vejaciones de esta magnitud: un manipulador», ha analizado.
Ahora «puede resultar muy fácil y tentador poner las diferentes informaciones que han trascendido bajo un foco de obviedad que, sencillamente, no es tal».
«NO TENGO CONSTANCIA DE NINGÚN ENCUBRIMIENTO»
«Ni he sido parte ni tengo constancia de ningún encubrimiento de ninguna agresión ni acción violenta porque no lo ha habido. Más bien me siento profundamente engañada, y ese engaño resulta devastador», ha manifestado en su comunicado personal.
Maestre tiene claro que ahora «lo importante es el dolor de las víctimas, que tienen que sentirse respetadas y acompañadas. Lo importante es erradicar las conductas y agresiones machistas de la política y la sociedad. Cueste lo que cueste y caiga quien caiga. Sea quien sea el agresor, y sea quien sea la víctima. Lo importante es terminar con cada espacio de impunidad, con cada pequeño detalle que minimiza los comentarios, las actitudes y las agresiones que no deben tener cabida».
«Las mujeres estamos hartas de eufemismos, de evasivas, de que el foco se ponga sobre nosotras, de que la conversación pública gire en torno a la excepción de lo escabroso y no a la normalidad que sostiene tantas violencias cotidianas. Estamos hartas de sentirnos juzgadas cuando hemos formado parte del entorno personal del agresor. Estamos hartas de que no se nos crea y se nos cuestione cuando somos agredidas. De no saber adónde acudir cuando nos ocurre algo como cualquiera de las cosas que están ocupando portadas y titulares, en toda su escala de gravedad», ha enumerado.
Rita Maestre ha querido agradecer especialmente «a todas las redes de mujeres, que ponen las herramientas, pero sobre todo el apoyo, la escucha y el cuidado». «Para hacer juntas la fuerza y la dignidad que intentan arrebatarnos», ha destacado.
«Animo también a cualquier mujer que haya sufrido una situación de agresión o acoso a que se valga de las redes de apoyo feminista para seguir adelante, y reflexiono con sinceridad: puede que no haya tarea política feminista más importante que ponerse a disposición de ello. Nada va a poder amordazar esta ola de dignidad. Es otra de las lecciones de la fuerza del feminismo. Yo, desde luego, me voy a dejar la piel en que así sea. Mucho ánimo, compañeras, y un abrazo enorme. Sin todas no hay nosotras», concluye la líder de Más Madrid.