IU dice, sobre el caso de Errejón, que hay responsabilidades que quien si tenía indicios no hizo nada

Asume que el caso «abre en canal a la izquierda» y alerta de que «hay demasiado machito alfa que con poder es una bomba de relojería».

MÁLAGA, 25

El coordinador federal de Izquierda Unida, Antonio Maíllo, ha reclamado «responsabilidades de quien no hizo nada, si tuvo algún conocimiento o indicio» ante las denuncias sobre acoso sexual y comportamiento machista del exportavoz de Sumar en el Congreso Íñigo Errejón.

En declaraciones a los medios de comunicación en Málaga tras un encuentro con Asociaciones de Madres y Padres (AMPAS) de centros educativos, Maíllo ha acotado su conocimiento de este caso a «desde ayer, cuando salió» la información de esas denuncias anónimas sobre Errejón, para seguidamente reconocer que «sí he recibido información de que había gente que lo sabía».

«Hay responsabilidades de quien, si tuvo algún conocimiento o indicio sobre esta información, de estos testimonios que han expresado algunas víctimas, no hizo nada. Y por tanto, sobre esa responsabilidad alguien tendrá que dar respuesta», ha demandado.

Por otro lado, ha exhortado a tomar medidas de «cirugía radical», tanto en términos políticos y organizativos, así como de «mensaje a la sociedad» a la que hay que decirle la verdad y hay que reconocer los hechos».

Al hilo, Maíllo ha pedido «abordar con carácter integral medidas reorganizativas de todo lo que es el espacio del Grupo Parlamentario para iniciar una nueva etapa», mientras que ha precisado que esa nueva etapa requiere que «se resuelvan bien las pasadas».

«Todas las organizaciones tienen que ser copartícipes de las decisiones que se tengan, tanto para la nueva portavocía, la reestructuración del grupo, las prioridades políticas y el encuentro con la sociedad», ha proseguido reflexionando.

UN CASO QUE «ABRE EN CANAL A LA IZQUIERDA»

El coordinador de IU ha reconocido que se trata de «un caso muy doloroso porque esto abre en canal a la izquierda», para plantear seguidamente de que se trata de «una sacudida», además de que, de fondo, plantea «una inadecuación absoluta» entre lo que se dice y se defiende. Por ello, ha vuelto a instar a»afrontar con mucha radicalidad este debate» en el convencimiento de que «atraviesa a toda la sociedad».

Maíllo ha apelado a catalogar «la violencia machista como un problema estructural de la sociedad», con la precisión de que «la política es un ámbito donde esa violencia estructural se refleja con mucha dureza», comportamiento que ha atribuido a que «tiene mucho que ver con el poder, con ese machiruleo que hay en política», antes de lamentar un fenómeno como que «en política hay demasiado machito alfa y con poder es una bomba de relojería».

«SERÍA UN ERROR FOCALIZAR SOLO EN UN CASO»

«Sería un error focalizar solo en un caso», ha avisado Maíllo, con la premisa de que es una situación que supone «una interpelación a todas las organizaciones», por cuanto «esto le puede pasar a cualquiera», de manera que «le ha pasado a Más Madrid o Sumar, pero podía pasar en cualquier organización».

Ha advertido de la tentación de señalar este caso en concreto, por lo que ha reclamado «pocas bromas con demagogias de alguien que esté blindado ante esto», antes de insistir en que «estamos hablando de un problema estructural que nos interpela a todos», para reclamar entonces que «no solo es reestructurar las organizaciones, hay que reestructurar las cabezas de la gente que comete este tipo de actuaciones contra las mujeres».

Tras «agradecerles a esas víctimas que hayan dado el paso de contarlo», les ha ofrecido que «sientan el apoyo, el aliento y el respaldo de Izquierda Unida como organización a la que represento».

El líder federal de IU ha planteado sobre la responsabilidad de las organizaciones políticas «ponernos las pilas en todas las organizaciones, en la actitud, en evitar silencio» para que de esa forma «no seamos nunca cómplices de los silencios sobre la violencia machista».

«Hay que asumir ese debate sin matices», ha instado Maíllo, antes de recordarle a todos los partidos que «afecta a todo el mundo» y que «aquí no hay blindaje de nada porque tenemos un problema estructural».

Cuestionado por la apertura de una investigación interna en Sumar al respecto, Maíllo ha precisado que «Movimiento Sumar es un partido al que pertenecía Íñigo Rejón y que ha abierto una investigación, y ellos tendrán las noticias».

El coordinador federal de IU ha reclamado «transversalidad» para que «nos tengamos que poner las pilas como sociedad para combatir algo que no basta solo con normas y reglas, basta con mentalización de las cabezas de la gente».

«Hay una sacudida en nuestro país en este momento, y desde luego nosotros la tenemos, porque es un shock, obviamente, y hay que responder ante esto», ha precisado Maíllo sobre las consecuencias de estas denuncias sobre un líder político.

Sobre la repercusión en la coalición de gobierno de PSOE y de Sumar de la dimisión y renuncia a la política de Errejón, ha apelado a «tener un sentido de la responsabilidad sobre el soporte que hay en torno al mantenimiento del Gobierno», mientras que seguidamente ha apuntado que «no hay que ocultar que ahora mismo hay una situación de cierto desánimo».

Ha argumentado que «actuar políticamente es resolverlo bien» al esgrimir que «este país se juega mucho con la creación de un instrumento en el que se resuelva bien esta situación».

«Es un momento de afrontar una catarsis casi con respecto a cómo nos reorganizamos en los espacios de la izquierda, cómo abordamos las decisiones colectivas y cómo tenemos que afrontar en esta nueva etapa una decisión que nos compete a todos», ha remachado Maíllo su reflexión.