El nivel de la cultura de seguridad del paciente de los profesionales sanitarios baja en AP, según un estudio
El nivel de la cultura de seguridad del paciente de los profesionales sanitarios en Atención Primaria (AP) ha disminuido en los últimos años, según indican los resultados preliminares de un proyecto de investigación de la Sociedad Española de Calidad Asistencial (SECA) y la Fundación por la Investigación, Docencia e Innovación en Seguridad del Paciente (FIDISP).
«Disminuyen las puntuaciones globales positivas y suben las negativas, por lo que la percepción en conjunto baja», ha señalado Pilar Astier, miembro del ejecutivo mundial de Wonca World y coordinadora de la Sección Seguridad del Paciente SECA y SEMFYC.
Se trata de un proyecto en el que han participado profesionales sanitarios y no sanitarios de Atención Primaria y hospitalaria del Sistema Nacional de Salud y que tiene un triple objetivo: conocer el nivel de cultura de seguridad del paciente de los profesionales sanitarios y no sanitarios tras el cese de la pandemia Covid-19; averiguar si el nivel de cultura difiere del obtenido en estudios realizados anteriormente a la pandemia y estudiar las dimensiones valoradas negativamente y establecer recomendaciones de mejora.
Sus resultados se han presentado en uno de los cinco espacios SECA del XL Congreso de La Sociedad Española de Calidad Asistencial que se está celebrando en Las Palmas de Gran Canaria. Así, en cuanto a AP, Astier ha destacado cuatro diferencias globales entre 2024 y el estudio de 2011: baja la valoración global de seguridad del paciente; mejora la atención efectiva (la atención equitativa queda igual); disminuye la atención centrada en el paciente, a tiempo y eficiente, y todas las dimensiones de seguridad del paciente disminuyen en Atención Primaria menos la de trabajo en equipo que aumenta.
Por su parte, Santiago Tomás Vecina, director gerente de FIDISP, ha presentado los resultados relativos a los hospitales, señalando que el nivel de cultura de seguridad del paciente de los trabajadores sanitarios obtiene una puntuación global de 7,3 puntos, prácticamente similar a la del anterior estudio de 2009 que fue de 7,5 puntos.
«En hospitales, aunque la nota media sea similar a la anterior, se evidencia una mejora en el análisis de 2024 en 8 de las 12 dimensiones analizadas», ha indicado Tomás Vecina, al tiempo que ha destacado que mejoran significativamente, por ejemplo, dimensiones como el apoyo de la gerencia a la seguridad del paciente; las expectativas/acciones de los responsables del servicio/unidad y el trabajo en equipo entre unidades.
En negativo, ha señalado las tres dimensiones con un peor resultado con respecto a 2009: los problemas en cambios de turno y transiciones asistenciales, la percepción de seguridad y la frecuencia de eventos notificados.
Este estudio, elaborado con 5.212 respuestas en hospitales, pone de manifiesto también que en los servicios de urgencia de los hospitales hay una menor percepción de seguridad del paciente, y que es mayor en los equipos directivos. «No se observa diferencias estadísticas por tipo de profesional, si bien el colectivo de enfermería presenta valoraciones más bajas (7,1) que el resto de colectivos (7,3-7,6). Sí existen diferencias significativas entre la valoración del grado de seguridad, así como del resto de las dimensiones de la encuesta de los profesionales que pertenecen a Servicios de Urgencias con respecto al resto de colectivos analizados (6,6 vs 7,4), lo que sin duda merece una profunda reflexión», ha finalizado Tomás Vecina.