Sumar alerta de que las negociaciones con el PSOE para los PGE están «encalladas» por la reforma fiscal


Errejón proclama que en este punto van a ser «muy firmes» en esta cuestión

El portavoz de Sumar en el Congreso, Íñigo Errejóm, ha reconocido que las negociaciones con el PSOE para los Presupuestos Generales están «encalladas» por las diferencias sobre el alcance de la reforma fiscal y ha advertido a su socio de que serán «firmes» a la hora de que se suba carga impositiva a las grandes empresas y rentas.

En rueda de prensa en el Congreso, ha manifestado que una condición indispensable para el acuerdo es que se hagan permanentes los impuestos extraordinarios a la banca y a las energéticas, asegurando que se gravan sus «pingües» ganancias dado que son recursos para tener un Estado social «fuerte».

«Todo lo que no sea justicia fiscal serán recortes y nosotros entre justicia fiscal y recortes lo tenemos muy claro. Queremos justicia fiscal para tener un estado fuerte que puede proteger, que puede garantizar derechos y que puede impulsar el desarrollo y la industrialización de nuestro país», ha apostillado.

En consecuencia, ha expresado su preocupación por la postura de los socialistas y ha recalcado que lo primordial para tener nuevas cuentas públicas es el pacto entre socios del Ejecutivo, dado que luego será el momento de tratar las reclamaciones de los grupos parlamentarios.

A su vez, Errejón ha manifestado que no hay que escuchar a las «lágrimas de millonarios» que profetizaban el desastre con los impuestos a los beneficios extraordinarios de la banca y las energéticas, dado que han contado con márgenes sustanciosos y han permitido dar a las arcas públicas 2.900 millones.

A su vez, ha reivindicado que Sumar aspira a introducir un impuesto a las grandes herencias que superen un millón de euros, tributos medioambientales a los bienes de lujo o al queroseno y terminar con la exención del IVA a la sanidad y educación pública.

ACUSA A REPSOL DE «CHANTAJEAR» AL GOBIERNO

Cuestionado por la posición del gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, quien considera «deseable» cambiar el diseño actual del impuesto a la banca y hacerlo «lo más neutral posible», Errejón ha respondido que es un concepto que debería explicar porque no lo entiende. Al hilo, ha enfatizado que el sentido de su reforma fiscal es bajar tributos a las clases populares y subirlos a los multimillonarios.

Finalmente, ha criticado ha acusado a Repsol, con su decisión de elegir Portugal para invertir 15 millones de euros ante la inestabilidad regulatoria y fiscal de España, al tildarlo de un ejemplo de como la «oligarquía» trata de «chantajear» y hacer «política contra un Gobierno democrático salido de las urnas».

«Nosotros lo decimos muy claro, Repsol era pública y se privatizó. Y ahora se permite intentar chantajear al Gobierno diciendo que se lleva inversiones estratégicas. El Gobierno se tiene que plantear entonces una política de estímulos a las empresas que sí cumplen y de endurecimiento a las empresas que no cumplen», ha zanjado.

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