Fundación IDIS llama a una «interoperabilidad eficaz» entre la sanidad pública y privada para lograr «un paciente único»
El presidente de la Fundación IDIS, Juan Abarca, ha instado a una colaboración entre la sanidad privada y la pública a través de una «interoperabilidad eficaz y real» de los sistemas y herramientas informáticas para que se consiga lograr un «paciente único» en un sistema sanitario «integrado».
Así se ha pronunciado en el marco de la sesión Perspectivas sobre integración sanitaria , organizada en el Healthstrategy Summit, en la que ha mantenido un diálogo con Miguel Ángel Pérez Laguna, presentador de Humanos en la oficina en Capital Radio.
En este contexto, desde la Fundación IDIS se está trabajando en iniciativas como miHC, una plataforma de intercambio de información que permite que las historias clínicas estén disponibles entre diferentes centros privados adheridos, favoreciendo la continuidad asistencial.
Asimismo, Abarca ha destacado que la Fundación IDIS se propone como «intermediaria» para facilitar el cumplimiento del Espacio Europeo de Datos Sanitarios para el resto de las entidades sanitarias privadas del sistema (desde hospitales o residencias a plataformas extrahospitalarias o farmacias comunitarias), «con el fin de crear un nodo único de datos de la sanidad privada que pudiera conectar directamente, cuando sea posible, con el nodo del sistema público y así aglutinar toda la información clínica alrededor del paciente con independencia de su titularidad».
Así, Abarca ha llamado a fomentar «una visión integradora de la sanidad» que cuente con los recursos de los sistemas público y privado, a fin de garantizar «una cobertura sanitaria más amplia y eficaz, mejorando el acceso, reduciendo los tiempos de espera y optimizando los recursos disponibles».
Según Abarca, la sanidad privada tiene un impacto «considerable» en la economía y en la sostenibilidad del sistema sanitario en España. Según estudios realizados por la Fundación IDIS, el sector privado representa el 28,4 por ciento del gasto sanitario total; además, lleva a cabo el 32,6 por ciento de las intervenciones quirúrgicas, registra el 22,6 por ciento de las altas y atiende el 25,2 por ciento de las urgencias.
Por ese motivo, según Abarca, «la clave está en construir un sistema de cooperación y de continuidad, beneficiando así al conjunto de la población».
Durante su exposición, ha matizado que el sistema sanitario no se ha adaptado a las necesidades, tal y como ha pasado con otros países europeos, como consecuencia del envejecimiento, la policronicidad y la prevención.
Sin embargo, en España, a diferencia de otros países europeos, se ha desarrollado un sector privado «complementario» –que da servicio al 25% de la población–, lo que, junto con otras características del sistema y el desarrollo de las comunicaciones digitales, hace que se esté en una situación «de ventaja» para tratar de reconducir la situación y ayudar al sistema sanitario público.
Por último, ha destacado que la sanidad se enfrentará a desafíos como la sostenibilidad económica, el envejecimiento de la población o la transformación digital en los próximos años. Por ello, «es fundamental huir de los prejuicios y ver a la sanidad privada como un complemento para que el sistema sanitario funcione correctamente». Además, para seguir avanzando es «esencial» que existan unas competencias profesionales adaptadas a las necesidades de los pacientes, según Abarca.