La estadounidense Flat Footed aflora un 3,2% en Grifols tras la demanda colectiva desde Los Ángeles
La firma estadounidense de inversión Flat Footed LLC, con sede en Seattle (Washington), ha aflorado una participación del 3,129% en el capital social de Grifols, en un contexto marcado por el inicio de una demanda colectiva ( class action ) contra la compañía de hemoderivados por parte de un bufete de abogados de Los Ángeles, que han animado a los inversores con pérdidas a ponerse en contacto con el despacho.
Según los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) consultados por Europa Press, esta participación surge bajo el nombre de Marc Andersen, propietario de Marc P Andersen 2016 Irr Trust, que controla Flat Footed LLC.
En concreto, el paquete accionarial total de la estadounidense en Grifols asciende a 13.335.000 títulos, que según los actuales precios de mercado, de 8,342 euros en el Ibex 35 a las 11.00 horas de este miércoles, está valorado en 111,24 millones de euros.
El porcentaje total de la participación de Flat Footed se concreta en derechos de voto atribuidos a las acciones.
Grifols, por su parte, rebotaba este miércoles más de un 1% en el Ibex 35, hasta intercambiar sus acciones a 8,342 euros, tras cerrar ayer con una caída del 5,39%, con sus títulos a 8,258 euros.
En este contexto, en la madrugada de ayer –hora española– se conoció que la firma de litigios estadounidense sobre derechos de los accionistas The Schall Law Firm ha puesto en marcha una demanda colectiva ( class action ) contra Grifols.
Ligado a esto, fuentes del mercado han informado a Europa Press que las class actions son «algo normal y típico en Estados Unidos», al tiempo que han recordado que fue en enero cuando este despacho de Los Ángeles avisó de que podría iniciar este tipo de demanda.
En concreto, The Schall Law Firm anunció unos días después del primer ataque del fondo bajista Gotham City Research contra la firma española que iba a investigar reclamaciones en nombre de inversores de Grifols «por violaciones de las leyes de valores».
Según explicó el bufete estadounidense, la investigación «se centra en si la empresa emitió declaraciones falsas y/o engañosas y/o no divulgó información pertinente a los inversores».