UGT afea al Gobierno haber «ignorado» el riesgo de un ERE al aprobar la venta de Vodafone en España a Zegona
El fondo británico propone una indemnización de 24 días de salario con un tope de 14 mensualidades para los 1.198 trabjadores afectados
Este martes se ha constituido la mesa de negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) que el fondo británico Zegona ha propuesto en Vodafone España para 1.198 trabajadores y, en este contexto, el sindicato UGT ha afeado al Gobierno haber «ignorado» el riesgo de que se produjese un despido colectivo en la compañía en el momento de aprobar la venta del negocio de la teleco al fondo británico por 5.000 millones de euros.
El sindicato ve «injustificable» que Zegona incida en las pérdidas económicas de la teleco para argumentar el ERE en la compañía por causas económicas, productivas y organizativas dado que las mismas «eran conocidas» y también a que el fondo británico pudo constatarlas en la due dilingence previa a la compra «para destruir el futuro de 1.198 familias».
«Cabe preguntarse, ¿le comunicaron o le ocultaron al Gobierno su necesidad de afrontar un ERE dada la situación económica? Y el Gobierno. ¿Tal es su dejadez que ignoraron ese peligro a la hora de aprobar la venta? Si para la viabilidad de Vodafone España hay que destruir empleo, ¿cómo piensa el ministro (en referencia al titular de Transformación Digital, José Luis Escrivá) que se van a afrontar las inversiones que le han prometido (Zegona) para mantener y mejorar la calidad de la red?», ha criticado el sindicato en un comunicado.
«El señor Escrivá no parece capaz de cumplir con las obligaciones para las que le pagamos todos los españoles», ha añadido UGT, que también ha argumentado que el Gobierno deberia «defender el empleo como motor de generación de riqueza», al tiempo que ha opinado que «esto no es lo que parece que está pasando en el sector de las telecomuncaciones».
En esa línea, la organización ha defendido que la destrucción de empleo en las telecos es consecuencia de una «regulación perniciosa».
«Un empleo que, por sus características de formación, de salario y de condiciones laborales aportan riqueza real en el territorio, con altas aportaciones de impuestos», ha agregado.
Más allá de las críticas, UGT ha trasladado que la primera propuesta de Zegona para indemnizar a los 1.198 trabajadores que, en principio, se verán afectados por este despido colectivo –normalmente la afectación se reduce a medida que avanzan las negociaciones– es de 24 días de salario por año trabajado con un tope de 14 mensualidades.
En tanto, CCOO ha señalado en otro comunicado que la empresa también ha propuesto un plan de recolocación externo y un convenio especial de la Seguridad Social para los trabajadores mayores de 55 años.
El Consejo de Ministros autorizó el pasado 14 de mayo la compra del negocio de Vodafone en España por parte del fondo británico Zegona, una operación valorada en 5.000 millones de euros y que se anunció a finales del pasado octubre.
«Como en operaciones anteriores de esta naturaleza, que se han materializado recientemente, la empresa autorizada se ha comprometido a un plan a medio plazo de inversiones en el ámbito de las telecomunicaciones, tanto en el ámbito fijo como en el móvil, y, además, a mantener en todo momento una solvencia financiera elevada», aseguró Escrivá en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en el que se aprobó la operación.
Tras ello, el pasado 1 de junio se puso al frente de Vodafone España José Miguel García (exconsejero delegado de Euskaltel), que sustituyó en el puesto de consejero delegado a Mário Vaz.
Precisamente, CCOO ha criticado que Zegona haya planteado este ERE en la compañía menos de 15 días después de que la nueva directiva se pusiese a los mandos de la empresa, en la que se ejecutará el quinto despido colectivo en España desde 2013, los cuales se han saldado con la salida de alrededor de 3.200 trabajadores.
«Ante tanta salida de personal en tan poco tiempo, una plantilla exhausta y maltratada a la vez que aparentemente bien dimensionada por las sucesivas direcciones, ha de enfrentarse una vez más, hoy en junio de 2024, a un salvaje proceso de despido colectivo con la intención adelantada de eliminar 1.198 puestos de trabajo, con una afección de casi un 40% de la plantilla (3.268 trabajadores en total)», ha destacado CCOO en su comunicado.
«Tras la toma de posesión hace menos de un mes de Vodafone/Zegona, que en vez de centrar sus esfuerzos en políticas empresariales de reflote, optan por soluciones cortoplacistas, centradas en ahorro de costes laborales y no en políticas de crecimiento, inversión e innovación, queremos un proyecto, no un desguace», ha añadido el sindicato.
RECHAZO DEL ERE
En este contexto, CCOO ha trasladado su «rotundo rechazo» al ERE en Vodafone España, ha solicitado su retirada y ha pedido que en la mesa de negociación también participe la patronal para «buscar alternativas», estrategias empresariales y planes de negocio que permitan construir una compañía «viable» y comprometida con los trabajadores.
«No obviamos las dificultades asociadas a la deficiente regulación del mercado de las telecomunicaciones, a la feroz competencia de las low cost y los operadores virtuales, pero estos problemas son comunes a más empresas, y siempre hay alternativas», ha agregado CCOO.
QUINTO ERE DESDE 2013
Cabe recordar que este nuevo ERE en Vodafone es el quinto que afecta a la compañía en España desde 2013, unos despidos colectivos que, sin tener en cuenta el actual, han supuesto la salida de la empresa de alrededor de 3.200 empleados.
En concreto, en 2013 la empresa ejecutó un ERE que afectó a 620 trabajadores, mientras que en 2015 hubo otro que supuso el despido de 1.059 personas. A ese le siguió otro en 2019 en el que salieron 1.102 empleados, mientras que en 2021 la plantilla se redujo en 442 efectivos.
El nuevo ERE en Vodafone se suma a otros despidos colectivos acometidos en el sector en los últimos meses, como el de Telefónica y Avatel Telecom.
El de Telefónica, resuelto definitivamente en febrero de este mismo año, se saldó con la salida de 3.420 trabajadores de forma voluntaria de sus tres principales filiales en España (Telefónica de España, Móviles y Soluciones).
En tanto, el de Avatel Telecom se resolvió hace justo una semana con la salida de 674 trabajadores, casi el 36% de la plantilla de la empresa, y también contempla adhesiones voluntarias.