La UE y Reino Unido buscan acuerdo en semanas sobre Gibraltar tras pactar «líneas políticas» para aeropuerto y frontera
Albares y Picardo coinciden en el ambiente constructivo y eluden entrar en los detalles
BRUSELAS, 12
La Unión Europea y Reino Unido tratarán de culminar en las próximas semanas un acuerdo sobre el marco de relaciones con Gibraltar, cuatro años después del Brexit y después de que este viernes en Bruselas las partes lograran fijar las «líneas políticas generales» en asuntos clave que hasta ahora permanecían encallados, como la cuestión de la frontera y el aeropuerto.
«Las negociaciones se han celebrado en una atmósfera constructiva y se han conseguido avances significativos», indica el comunicado conjunto tras la reunión en la capital europea del jefe negociador de la UE, el vicepresidente comunitario Maros Sefcovic; el ministro de Exteriores británico que lidera la delegación británica, David Cameron; el jefe de la diplomacia española, José Manuel Albares, y el ministro principal de Gibraltar, Fabián Picardo.
«Se han acordado líneas políticas generales, incluidas sobre el aeropuerto, bienes y movilidad. Las negociaciones seguirán durante las próximas semanas para concluir el Acuerdo UE-Reino Unido», zanja el breve texto consensuado y publicado en nombre de los cuatro políticos.
La cita de este viernes es la primera celebrada a tan alto nivel desde que arrancaron las negociaciones hace cerca de dos años y medio, durante los que se han celebrado 18 rondas de contactos a nivel técnico. Se produce, además, una semana después de que otro vicepresidente de la Comisión, Margaritis Schinas, pusiera en duda las opciones de alcanzar un acuerdo antes de que se celebren las elecciones europeas de junio y provocara con ello malestar en el Gobierno español.
El acuerdo que buscan la UE y Reino Unido debe resolver el limbo en el que se encuentra Gibraltar en su relación con el bloque desde que se consumó el Brexit. Bruselas negocia con Londres desde octubre de 2021 sobre la base del llamado Acuerdo de Nochevieja sellado entre el Gobierno español y el británico el 31 de diciembre de 2020.
Dicho memorándum prevé la supresión de la Verja y la entrada de facto de Gibraltar en Schengen, para lo cual los controles fronterizos deberán trasladarse al puerto y el aeropuerto. Reino Unido rechaza que sean agentes españoles los que efectúen esos controles, de ahí que sobre la mesa esté una propuesta para que durante un periodo transitorio de cuatro años esta tarea recaiga en la Agencia Europea de Fronteras (Frontex).
Otro de los aspectos más espinosos de la negociación, de la que apenas han transcendido detalles en los más de dos años transcurridos, es el del aeropuerto de Gibraltar. El aeródromo se encuentra construido en el istmo que une el Peñón con el resto de la península y es territorio en disputa.
España ha venido reclamando el uso compartido de las instalaciones para que puedan beneficiarse de ello toda la región, pero Reino Unido se opone de plano, considerando que choca con su postura respecto a la soberanía.
ALBARES ESGRIME QUE NO ES UNA NEGOCIACIÓN MÁS
Al término de algo más de tres horas de reunión, en declaraciones a la prensa Albares ha puesto el acento en que no se trata de «un día de negociación más». «Ha sido un día muy importante donde se han conseguido avances importantes y en que todos estamos de acuerdo en seguir trabajando las próximas semanas para concluir el acuerdo», ha resumido.
El ministro ha confirmado que han pactado «las líneas políticas generales, sin que haya una fecha» y ha explicado que todos han acordado no entrar en los detalles sobre la mismas porque, como dijo Sefcovic hace unos días, «en estos momentos la negociación está en su apogeo y queremos protegerla y que llegue a buen puerto».
Por otra parte, ha indicado que el Gobierno español y la Comisión Europea, que es quien negocia en nombre de los Veintisiete, están «perfectamente alineados» y «en las próximas semanas «todos los textos que presentemos e intercambiemos serán en todo momento texto en conjunto».
El jefe de la diplomacia ha reconocido que le gustaría que el acuerdo «fuera mañana», pero ha reconocido que aún «quedan semanas de intenso trabajo». Con todo, ha puesto en valor el compromiso mostrado durante la reunión de llegar a una conclusión cuanto antes y también la «atmósfera constructiva». «Por España no va a quedar que sea lo antes posible», ha remarcado.
En línea muy similar, elogiando igualmente el «espíritu constructivo» con que ha transcurrido la cita, se ha pronunciado el ministro principal gibraltareño, que ha resaltado que ha permitido realizar un «gran progreso» pero ha eludido entrar en los detalles de lo que se ha acordado y los temas que aún quedan pendientes «porque la negociación no ha terminado».
«Esperamos que en las próximas semanas podamos finalizar esta negociación con un texto legal que reflejará las líneas políticas generales que hemos aceptado hoy», ha añadido Picardo.
En cuanto a los plazos para la conclusión, se ha limitado a recordar que «la Comisión tiene una vida», en referencia a las elecciones europeas de junio que traerán consigo una nueva Comisión para noviembre. «No quiero medirlo en tiempo», ha añadido, ante la insistencia de los periodistas, asegurando que su voluntad es hacer todo lo posible para que haya un acuerdo final.
«Estoy convencido de que todos están comprometidos en llegar a ese acuerdo. Nadie está poniendo obstáculos. Todos están trabajando duro para asegurar que el acuerdo sea posible», ha resaltado. «Estoy seguro de que será pronto», ha remachado.