Vecinos del garaje incendiado se quejan de «dejadez absoluta» y «falta de mantenimiento»
Varios vecinos de los bloques afectados por el incendio en un garaje comunitario esta pasada madrugada, en la calle José María Cossío de Santander, en la zona de Los Acebos, se han quejado de «falta de mantenimiento» de la instalación y de «dejadez absoluta» también desde el anterior fuego registrado en el lugar, hace 17 años.
«No hay nada en condiciones», ha resumido una mujer, propietaria de uno de los vehículos calcinados –al menos 28 en total, 19 coches y nueve motos, mientras que ha habido daños en otros 50– y que también perdió otro turismo en 2007, al igual que ha pasado a otros vecinos que ya residían entonces en estos bloques.
«Ya está bien», se ha quejado a los periodistas esta mujer, para quien en el garaje comunitario estaba «todo de asco», indicando al respecto que no había «ni luz», pero sí cables sueltos y colgando -según ha dicho- y tampoco se había «pintado», aspectos que han lamentado otros afectados.
Por su parte, el administrador ha explicado sobre la falta de medidas de mantenimiento denunciada que tras el anterior incendio en el garaje -«provocado», según ha asegurado algún vecino- no se acometió una obra prevista porque así se acordó entonces, ya que «no había dinero suficiente» para llevarla a cabo.
No obstante, ha aseverado que sí había extintores en la actualidad, en contra de lo que sostienen algunos vecinos, que niegan incluso que hubiera aspersores, a diferencia de en 2007, cuando «había y funcionaban». Pero ahora, ha insistido una mujer, el garaje «daba asco verlo» y daba «pánico».
El administrador también ha corroborado a los medios que no se celebraban reuniones de vecinos desde la pandemia del Covid, pero lo ha justificado por «cuestiones técnicas», señalando al respecto que están a la espera de datos y documentación bancaria para poder convocar y celebrar esas sesiones.
MUCHO HUMO
En cuanto al incendio en sí, registrado sobre las tres de la madrugada y que ha quedado sofocado y controlado a primera hora, los vecinos de los bloques afectados -cuatro portales con una veintena de viviendas cada uno- ha relatado que estaban durmiendo.
Algunos se percataron de que algo pasaba porque empezaba a fallar la luz en casa o al oír ruidos, de «explosiones» por el propio fuego -que ha dicho escuchar un hombre desde un quinto piso- y de los vehículos de Bomberos y Policía desplazados al lugar. Así, se asomaron a la ventana para comprobar qué pasaba y vieron mucho humo, que había entrado en la escalera.
SIN LUZ NI AGUA Y CON MIEDO Y PREOCUPACIÓN
En ese momento, los efectivos personados les comunicaron que no podían salir del domicilio, y despertaron también a otros residentes para que permanecieran dentro. Estuvieron así, sin luz ni agua y con «miedo y preocupación». Ha sido un «despliegue tremendo» y unas horas en las que lo han pasado «muy mal», según han expresado.
Una vez controlado y sofocado el fuego, han podido abandonar sus viviendas y muchos de ellos se congregaron desde primera hora en el exterior de los inmuebles y permanecían allí avanzada la mañana.
Solo se han registrado daños materiales por el humo y el fuego -con el que se han llegado a alcanzar 900 grados de temperatura en el interior del garaje- y no ha habido que lamentar personales, a excepción de un bombero que ha sufrido un corte en una mano y que ha recibido tres puntos de sutura.
SIN RELACIÓN CON LOS FUEGOS EN CONTENEDORES
Este nuevo incendio en el parking –corrido, que da servicio a cuatro comunidades y alberga más de 150 vehículos– no tendría a priori conexión o relación con fuegos registrados también esta pasada madrugada en diversos contenedores en distintos puntos de la ciudad, según han explicado fuentes municipales.
