Piden al Ministerio que el Plan Antitabaco tenga en cuenta la reducción del daño y no solo la cesación
Acusan a García de «no poner toda la evidencia científica» como base del Plan Antitabaco y solo «su ideología»
La Plataforma para la Reducción del Daño por Tabaquismo y diferentes expertos han pedido al Ministerio de Sanidad que el nuevo Plan Integral frente al Tabaquismo no se centre solo en la prevención y cesación del hábito tabáquico ya que esto «no es suficiente», si no que se apoye en «la reducción del daño por tabaquismo», teniendo en cuenta las herramientas de reducción del daño en las que incluyen los cigarrillos electrónicos como método para dejar el tabaco convencional.
Además, la Plataforma acusa a la ministra de Sanidad, Mónica García, de «no tener en cuenta toda la evidencia científica» para la elaboración del Plan Antitabaco, si no solo «la que encaja con su ideología», según ha señalado el cirujano oncológico del Hospital Gómez Ulla de Madrid y portavoz de la Plataforma para la Reducción del Daño por Tabaquismo, Fernando Fernández Bueno, en el webinar ¿Por qué nace obsoleto el plan de tabaquismo? .
«La prevención y la cesación no son suficientes, tenemos que apoyarnos en la reducción del daño. Las soluciones tienen que ser realistas para los fumadores. Dejar de fumar no es sencillo, y a la vista está, si llevamos 20 años con las mismas propuestas y no se ha reducido el número de fumadores, algo estamos haciendo mal si basamos todo nuestro esfuerzo en prevención y cesación», ha declarado Fernando Fernández Bueno.
El portavoz ha aseverado que algunas propuestas del Plan Antitabaco del Ministerio son «muy aceptables», pero hay otras que «no están al día o no se ha considerado toda la evidencia científica o bien directamente ya están obsoletas y no van a poder ayudar a los fumadores».
«El Plan no va a conseguir reducir de manera efectiva el número de fumadores porque solo se centra en proteger a la sociedad de los fumadores sin aportar herramientas a los que verdaderamente tienen el problema que son los millones de fumadores que todavía existen en nuestro país», ha declarado.
Por este motivo, desde la Plataforma han elaborado un plan integral con diez propuestas para acabar con el tabaquismo en España que, según ha asegurado Fernando Fernández, ya se las han hecho llegar al Ministerio de Sanidad y «no han obtenido respuesta». «Desde la plataforma vamos a seguir trabajando y escuchando para que se nos escuche y se entiendan nuestras propuestas, hablándolo, escuchándolo y debatiendo», ha afirmado.
Por un lado, la Plataforma se muestra favorable a poner «más impuestos al cigarrillo de combustión», pero solo en este ya que creen que «se está olvidando que el enemigo es el tabaco de combustión» pero que, «si el producto no tiene tabaco ni tiene nicotina no es tabaco».
«La guerra que se está intentando establecer es una guerra a la nicotina, una guerra a otros productos que es que directamente no tienen tabaco. De hecho, una de las equiparaciones que se quiere hacer con esto es en los productos con y sin nicotina», ha apuntado el portavoz refiriéndose al punto en el que se pretende equiparar la regulación de los productos como cigarrillos electrónicos o el tabaco calentado al tabaco convencional.
Asimismo, están de acuerdo en ampliar la protección para los menores pero, para ello, ha advertido que es necesario «poner el foco en la venta ilegal». También coinciden en la ampliación de los espacios sin humo, entre los que incluyen «terrazas, estadios y coches», a pesar de que el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, ya ha aclarado que en los espacios privados como los coches la regulación no puede aplicarse. Además, apoyan el empaquetado genérico para el cigarrillo de combustión.
Por otra parte, piden «soluciones realistas» para los fumadores que tengan en cuenta las «herramientas de reducción del daño como parches o chicles».
«Si ya las estamos haciendo, en algún caso, con productos que sí que están a nivel farmacológico aceptados, como son los parches y los chicles, incluimos los nuevos productos de liberación de nicotina por vía inhalada, como son los cigarrillos electrónicos, como sí que están haciendo otros países, donde claramente están teniendo resultados», ha sentenciado Fernando.
Por último, piden al Ministerio que ponga «la ciencia como base en la lucha del tabaquismo». «Me gustaría que la ministra y Padilla lo explicasen, que tengan en cuenta toda la evidencia científica no solo la evidencia científica en la que mi ideología está de acuerdo, si mi evidencia científica esta equivocada lo estoy haciendo mal y es muy fácil rebatirla», ha señalado.
En este contexto, desde la plataforma reclaman también «una formación específica y efectiva para los profesionales sanitarios» ya que «no puede ser que digan que los cigarrillos electrónicos o el tabaco calentado son igual de malos o incluso peores que el cigarrillo de combustión».
«Eso no es verdad, es mentira y denota que no te has leído nada de la evidencia científica de los últimos años, y estás trasladando una idea errónea, es decir, esos fumadores dicen, bueno, si esto es igual de malo, pues ya está, pues vamos a seguir como estamos. Y lo que le estás trasladando es un concepto negativo y erróneo», ha declarado el portavoz de la Plataforma.
En este sentido ha coincidido el catedrático de Química Analítica de la Universidad de Valencia, Miguel de la Guardia, quien ha calificado como «una barbaridad» que se equipare el cigarrillo de combustión a «los productos de reducción del daño».
«Si demonizamos esas alternativas, si las prohibimos, pueden ocurrir dos cuestiones. Una, mercado negro. Otra, que al final sea más sencillo seguir fumando. Se dice que es la puerta de entrada dice continuamente que es la puerta de entrada de que los jóvenes empiecen a fumar, y esto no está demostrado en ningún sitio», ha aseverado el médico experto en adicciones y especialista universitario en Medicina Interna y Drogodependencias, José María García Basterrechea.
CONTAR CON LOS FUMADORES Y CON LA EVIDENCIA CIENTÍFICA
Por su parte, el catedrático de Química Analítica de la Universidad de Valencia, Miguel de la Guardia, ha apuntado que en el Plan de Sanidad «hay carencias», concretamente una «grave» como es que «no cuenta con los fumadores» ya que «no se les ofrece otra salida que la cesación».
«Hay que aportar datos, no opiniones. Prohibir por prohibir no es una buena alternativa, prohibir por ideas y no basándonos en datos tampoco. La reducción del daño es la gran olvidada por el Ministerio», ha declarado Miguel de la Guardia.
Así, el experto ha apuntado que «se ha se ha cosido una medida ministerial con puntadas demasiado gruesas» y que «habría que hilar un poco más fino» y, para ello, ha señalado que «confía en que las comunidades autónomas aporten mayor sensatez».