El PSOE aleja un acuerdo con el PP para renovar el CGPJ y acusa a Pons de boicotearlo: «Nos tememos lo peor»
Gómez de Celis dice que el PP ha puesto «al peor posible para llegar a acuerdos» porque quieren «controlar» este órgano judicial
El secretario de Área Institucional y Grandes Ciudades del PSOE, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, afirma que se temen «lo peor» respecto a la negociación con el PP para renovar el Consejo General del Poder Judicial.
En este sentido acusa a los populares de situar al frente de la negociación «al peor posible para llegar a acuerdos» en referencia a Esteban González Pons, a quien acusan de estar boicoteando la negociación.
Los socialistas hacen estas declaraciones 48 horas antes de que se lleve a cabo la tercera reunión entre Pons, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños y el comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, para negociar el desbloqueo del CGPJ, que lleva más de cinco años con el mandato caducado por falta de acuerdo entre los dos grandes partidos.
Bolaños y Pons ya han llevado a cabo dos encuentros previos en Bruselas con la mediación de Reynders y este miércoles 13 de marzo celebrarán la tercera, en esta ocasión en Estrasburgo (Francia).
Sin embargo, después de que la semana pasada los socialistas sellasen un acuerdo con Junts y ERC para aprobar la Ley de Amnistía, el PP ha enfriado las posibilidades de pacto, al considerar que el PSOE ha traspasado las líneas rojas que ellos mismos se habían fijado con más cesiones al independentismo.
En este contexto, Gómez de Celis dice que afrontan la reunión de esta semana temiéndose «lo peor», es decir sin esperanzas de avanzar hacia un acuerdo, por la «actitud permanente de boicotear la renovación» que a su juicio está desplegando González Pons.
Así, ha indicado que esta es la «penúltima excusa» que pone Génova para no acometer el desbloqueo del CGPJ, al tiempo que les ha recordado que fueron ellos quienes propusieron este formato de negociación con la mediación de la Comisión Europea. En la misma línea, ha acusado al PP de no acceder renovarlo porque quieren «controlar» el Consejo. «Es un hecho gravísimo» ha terminado.
