La acusada de obligar a su nieta a tener relaciones con un señor dice que es una invención de la menor
El ICASS mantiene su petición de 15 años de prisión y la fiscal insiste en la absolución al no ver indicios suficientes para acusar
La mujer acusada de obligar a su nieta a mantener relaciones sexuales con un conocido de la familia lo ha negado este jueves en el juicio contra ella, en el que ha asegurado que eso «es falso» y ha apuntado a una invención de la menor porque, según ha dicho, le había referido que iba a hacer «cualquier cosa» y «lo imposible» para que no la mandara de regreso a su país.
Un extremo que ha corroborado la pareja de la procesada: «Mintió para quedarse en España», ha sentenciado en la reproducción de la grabación realizada como prueba preconstituida para esta vista, en la que la chica ha testificado a puerta cerrada y en la que los forenses han dado credibilidad a su relato y ven compatibles además los síntomas que presenta con los hechos denunciados.
En el plenario, celebrado en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria, las partes han elevado a definitivas sus conclusiones provisionales, manteniendo así la defensa la absolución de la enjuiciada y también la fiscal, al no ver indicios suficientes para mantener una imputación de esta «gravedad», llegando a interesar el sobreseimiento de las actuaciones durante la instrucción.
Sí se ha ratificado en su escrito el Instituto Cántabro de Servicios Sociales, que tutela a la menor y ejerce la acusación particular. Pide 15 años de prisión, por un delito continuado de abuso sexual a menores y otro igualmente continuado de corrupción de menores.
Este organismo público, dependiente del Gobierno regional, considera que la acusada trajo a su nieta de República Dominicana cuando tenía once años y dos años después, a la edad de trece, la obligó a mantener relaciones con un hombre mayor, ya fallecido.
El ICASS entiende también que durante el confinamiento por la pandemia del Covid la mujer obligó a la niña a realizarse fotografías y vídeos de contenido sexual para enviárselos al señor, así como que la obligaba a realizar todas las tareas domésticas y de limpieza del hogar, recibiendo «continuos desprecios y castigos».
Extremos que ha negado la procesada, que se ha declarado no culpable, al igual que ha hecho un hijo suyo y tío de la joven: «mi madre es inocente», ha afirmado.