Promarca pide luchar contra las frascas y licores sin etiquetado que ponen en riesgo la salud del consumidor
Denuncia su uso en la hostelería y restauración que sirven licores y cremas sin el envasado ni etiquetado requerido por ley
Promarca denuncia que la normativa de comercialización y etiquetado de determinadas bebidas espirituosas (licores y cremas) sigue sin cumplirse en amplios sectores de la hostelería y reclama luchar contra las frascas y licores sin etiquetado que ponen en riesgo la salud del consumidor, según informa en un comunicado.
En concreto, la asociación se ha unido a Espirituosos de España y a la Asociación para la Defensa de la Marca (Andema) en su petición a las Administraciones para que lleven a cabo una mayor concienciación y un control de su cumplimiento.
Así el artículo 10 del Real Decreto 164/2014, de 14 de marzo, exige que determinadas bebidas espirituosas como licores y cremas sean comercializados «debidamente envasados y etiquetados, quedando expresamente prohibido su trasvase o rellenado» y estableciendo normas complementarias para la producción, designación, presentación y etiquetado de determinadas bebidas espirituosas.
Un normativa similar a la existente ya en el ámbito de la comercialización del aceite de oliva, que entró en vigor el 1 de enero de 2014, en el cual queda reflejada la obligación de bares, restaurantes y catering a presentar a los clientes el aceite de oliva en envases debidamente etiquetados con sistemas que impidan el rellenado o la pérdida de su integridad una vez abiertos.
Según una encuesta realizada por Espirituosos de España mostraba que el 80% de los consumidores reconoce que les ofrecen licores servidos en frascas sin etiquetar cuando le obsequian con un licor, y que el 67% desconoce la existencia de una normativa que prohíbe el trasvase y rellenado de bebidas espirituosas.
En la actualidad el incumplimiento de la normativa es generalizado, vulnerando así el derecho de los consumidores a saber qué están tomando y a conocer las características y la información del producto que habitualmente aparece en la etiqueta. Así, las garrafas de este tipo de bebidas que se utilizan para rellenar las frascas en las que se sirve posteriormente el licor en la mesa, representan el 20% de las ventas de licores y se concentran principalmente en la hostelería (91%), lo que muestra la finalidad de rellenar frascas para dar una falsa imagen de producto artesanal.
Así, el envase de tres litros es el que más peso tiene dentro del gran formato de la hostelería, y supone aproximadamente 26 millones en ventas de licores de gran formato.
En este contexto, Promarca hace un llamamiento a todos los operadores implicados -Administraciones, hostelería y consumidores- para «colaborar conjuntamente en la concienciación y sensibilización sobre esta norma esencial para proteger a los consumidores y garantizar su cumplimiento».
El presidente de Promarca, Ignacio Larracoechea, denuncia que en la hostelería y restauración se ha detectado el uso de frascas para servir licores y cremas sin el envasado ni etiquetado requerido por ley. «Esta práctica vulnera el derecho de información de los consumidores y representa un riesgo para su salud y es necesario tomar medidas entre todos los implicados», ha recalcado.