Un investigado en Cantabria de una organización que sextorsionaba a sus víctimas tras solicitar contactos de mujeres
La Guardia Civil ha detenido e investigado a nueve personas, siete e ellas afincadas en Valencia, una en Cantabria y otra en Valladolid, pertenecientes a una organización criminal que sextorsionaba a sus víctimas tras haber solicitado contactos de mujeres a través de Internet.
Según han informado este martes fuentes del Instituto armado, durante la operación, denominada Quilombeda , los agentes han localizado a 32 personas perjudicadas y el importe estafado asciende a 40.000 euros.
Por su parte, a los presuntos autores de los hechos se les atribuyen los delitos de extorsión, amenazas, estafa, suplantación de identidades, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal.
La operación se inició en marzo de 2023 cuando una de las víctimas puso una denuncia ante la Guardia Civil y explicó que había solicitado contactos con mujeres a través de Internet y que pocos días después recibió amenazas por mensajería móvil con exigencias de dinero a cambio de no enviarle un sicario a su domicilio.
En dichas amenazas, se le insinuaba que si no realizaba el pago que solicitaban, tomarían acciones contra él «como palizas e, incluso, el asesinato». Esta persona llegó a realizar transferencias por un importe de 12.000 euros.
La Guardia Civil ha explicado que los autores realizaban las estafas bajo el método delictivo conocido como el «timo del sicario», que consiste en un chantaje que comienza cuando los delincuentes introducen anuncios falsos en páginas web dedicadas a contratar servicios de contactos con mujeres.
Una vez que la víctima contrata este tipo de servicios recibe mediante mensajes o, incluso, llamadas telefónicas amenazas de muerte por parte de un supuesto sicario y le pide que pague una suma de dinero para evitar ser asesinado o herido. Cuando se hacen con el dinero estafado, lo redirigen a cuentas bancarias que ellos controlan «o compran cuentas bancarias de terceras personas vulnerables bajo comisiones o engaño previo».
La Guardia Civil ha informado además de que los autores se dedicaban también a las estafas asociadas a falsas ofertas de trabajo a través de Internet o redes sociales. Sus víctimas interactuaban con ellos a través de llamadas telefónicas o mensajes y tras llegar a un «supuesto acuerdo», sus víctimas remitían copia de sus documentos personales DNI, así como números de cuentas bancarias. Ya con la documentación en su poder, los miembros de la organización daban de alta servicios de telefonía y cuentas bancarias, todo ello con los documentos de sus víctimas que se interesaron por los anuncios de empleo.
Como resultado de la operación, se ha detenido e investigado a siete personas en Valencia y en una segunda fase de explotación también se ha investigado a otros dos integrantes de la organización en Cantabria y Valladolid.