El consumo fuera del hogar ligado al deporte se desploma un 19% en 2023 con un gasto un 31% inferior
Los españoles comen menos fuera de casa y lo hacen de forma más planificada
Los españoles consolidan la tendencia de comer fuera de casa menos veces y lo hacen de forma más planificada para disfrutar de momentos especiales, debido al impacto de la inflación, según los datos de cierre de 2023 de consumo fuera del hogar de Kantar Worldpanel, que muestran que el consumo en bares y restaurantes ligado al deporte se desploma un 19% con un gasto un 31% inferior.
En concreto, a pesar de los buenos resultados en términos de valor, los datos muestran un descenso del 2% en el número de actos de consumo fuera del hogar, aunque con un aumento generalizado en el coste por acto, en parte derivado de la inflación.
De esta forma, en el contexto en el que, sobre todo a finales de año, un porcentaje de la población ha decidido no consumir fuera del hogar, los actos que ganan o se mantienen son los que se pueden asociar a ocasiones especiales, relacionadas con el placer y el relax.
Según el informe, la hostelería muestra su rol de socialización y disfrute, con las cenas subiendo ligeramente (+0,5 puntos porcentuales de penetración) o la solidez de momentos como el fin de semana o el tardeo, que se consolidan como ocio diurno.
Además, conviven con estas tendencias los momentos ligados al trabajo, como las comidas con compañeros de empresa o de negocios, que poco a poco se recuperan sobre todo a final de año, coincidiendo con la Navidad.
Por otro lado, la caída del consumo fuera del hogar ligado al deporte presenta un descenso del 19% de los actos con respecto a 2022 que se concreta en un gasto un 31% inferior.
De esta forma, el momento de bajar al bar para ver fútbol ha perdido peso en 2023, aunque tampoco representa un hábito muy extendido entre los españoles en el conjunto de actos fuera del hogar.
El incremento del coste de la vida ha hecho mella entre aquellos que más cargas financieras tienen, como hipotecas y colegios, que son la franja de los de 35-49 años, que pierden relevancia y explican casi tres cuartas partes de la caída de los actos de consumo. En cambio, la franja más mayor, la de los 60-75 años, tracciona del consumo fuera del hogar.
En cuanto a canales, la restauración independiente continúa por delante de la organizada. Así, el 90% de los consumidores han consumido en restauración independiente este año y siete de cada 10 lo han hecho en alguna de las marcas de la restauración organizada.
Según la consultora, ambos canales se encuentran ante el reto de atraer al consumidor aportando experiencias ligadas al placer y al momento especial, que seguirán siendo grandes oportunidades de expansión en 2024.
El fast food en 2023 ha sido el único canal que ha atraído más compradores que el año previo, con un ritmo envidiable atrayendo consumidores más adultos, y además con ocasiones revalorizadas no tan habituales de este canal.
«La restauración sigue buscando adaptarse a estas nuevas demandas para evolucionar y aprovechar las oportunidades, en un momento en el que priman los momentos de celebración y placer por encima de la improvisación, y tiran más las franjas jóvenes y mayores frente a las centrales que cuentan con menos tiempo, más responsabilidades y más gastos», ha subrayado Cristina García, OOH, Restauración & Foodservice Business Director de Kantar Worldpanel.
