La UE dará 210 millones a Mauritania para gestionar migración, ayuda humanitaria y generación de empleo
Bruselas también destinará otros 22 millones a equipar a un nuevo batallón encargado de luchar contra el terrorismo
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, ha anunciado este jueves que la UE brindará a Mauritania una ayuda financiera por más de 210 millones de euros a este país para gestionar los flujos migratorios, ayuda humanitaria e inversiones para la generación de empleo.
Desde Nuakchott, donde ha viajado junto con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Von der Leyen ha puesto en valor la importancia que tiene para la UE la asociación con este país teniendo en cuenta la situación de inestabilidad que se vive en el vecino Sahel y ha dejado claro que el objetivo es que esta asociación siga fortaleciéndose.
«La falta de seguridad y de oportunidades económicas hace que muchas personas se vean abocadas a la emigración», ha subrayado la presidenta de la Comisión, defendiendo la necesidad de dar «más oportunidades a los jóvenes» en un país en el que el 60% de la población es menor de 25 años.
En este sentido, ha indicado que la UE y Mauritania van a cerrar una «hoja de ruta conjunta» de aquí a la primavera que estará acompañada por una dotación financiera por más de 210 millones de euros este año «para gestionar los flujos migratorios, para la ayuda humanitaria a los refugiados y también para las inversiones en empleo, mejora de competencias y mejora del espíritu empresarial gracias a la iniciativa Global Gateway».
Este instrumento en concreto, ha incidido Von der Leyen, permitirá a la UE apoyar a Mauritania en la transición energética, y en particular a aprovechar su «enorme potencial» en lo relativo al hidrógeno verde, contribuyendo a financiar proyectos en sectores estratégicos en este ámbito, como infraestruras, que a su vez generarán empleos.
Para ello, ha recordado, ya está en marcha un proyecto en el marco del Team Europe en el que participan España, Francia y Alemania y que debe sentar las bases para una cooperación fructífera en el ámbito del hidrógeno verde entre la UE y el país africano. Para ello, está previsto que una misión de empresas europeas visite Mauritania en marzo para explorar oportunidades de inversión.
APUESTA EL HIDRÓGENO VERDE
Según ha explicado Von der Leyen, para poder aprovechar las condiciones favorables que ofrece el norte de Mauritania tanto para la energía eólica como la solar, hará falta trasladar hasta allí tanto equipos como tecnología.
En este sentido, la Comisión Europea, junto con el Banco Europeo de Inversiones (BEI), respaldará proyectos de carreteras de Nuakchott a Nuadibú, así como invertirá en una línea de alta tensión de 1.400 kilómetros desde la capital a Néma (sureste) con una central solar en Kiffa (sur) para que exista un suministro eléctrico estable. También participará en la financiación de un segundo cable submarino de fibra óptica para el país.
En materia de seguridad, la presidenta de la Comisión ha reconocido el «papel primordial» de Mauritania para «garantizar la estabilidad» ante la «situación muy precaria» que vive el Sahel. Por ello, ha anunciado que se va aumentar en más de 22 millones de euros adicionales, hasta los 40, este año la financiación para el equipamiento de un nuevo batallón de lucha contra el terrorismo y para asegurar la frontera con Malí, así como la formación de oficiales superiores de la Defensa.
Respecto al problema migratorio, Von der Leyen ha tenido palabras de elogio por la acogida por parte de Mauritania a más de 150.000 refugiados de Malí así como de los inmigrantes que atraviesan el país y que en su mayoría tienen como destino final las islas Canarias, donde en las últimas semanas han aumentado las llegadas de cayucos procedentes de las costas mauritanas.
«La UE y Mauritania tienen que reforzar su cooperación en este ámbito, también en lo que se refiere a la gestión de fronteras, el retorno y la asistencia a los refugiados», ha sostenido. A esto se destinará precisamente parte de los fondos anunciados por Von der Leyen.