Inspector de Hacienda cree que Axis Ventura «no prestó» para B3 Cable los servicios por los que cobró 6,3 millones
El inspector de Hacienda que este miércoles ha declarado como perito en el juicio de B3 Cable ha asegurado Axis Ventura «no prestó» los servicios de intermediación por los que se le abonaron desde la fábrica de Maliaño 6,3 millones, un dinero que, según ha dicho, acabó en la Isla de Man, un «paraíso fiscal».
Durante su declaración, ha argumentado que Axis Ventura, sociedad «vinculada» a B3 Cable, «no tenía dimensión» para prestar dichos servicios de intermediación, relacionados con la compra de la fábrica de Maliaño, que se le encomendaron a través de una carta de encargo –que hacía las veces de contrato– que tenía «contradicciones» y «cuestiones indiciarias» que así lo «evidenciaban».
Esta polémica factura de 6,3 millones es el núcleo central del juicio que se está celebrando desde la semana pasada en la Audiencia Provincial contra los siete exdirectivos británicos de B3 Cable que están acusados de apropiación indebida y por un delito contra la hacienda pública.
Según la Fiscalía, los acusados se apropiaron indebidamente de esos 6,3 millones con esa transferencia de B3 a Axis, empresa en la que tenían participación cinco de ellos y que –dice– «no prestó ningún servicio ni realizó gestión alguna».
También se les considera autores de un delito contra la hacienda pública por, supuestamente, defraudar en la liquidación del impuesto de sociedades al deducirse gastos que formaban parte de esa factura cuando, a juicio de la acusación (Fiscalía y Abogacía del Estado), no eran gastos por tratarse de «servicios ficticios». Por estos delitos, se pide a cada acusado entre cinco años y medio y 6 de cárcel, además del pago de multas e indemnizaciones.
Al respecto, el inspector de Hacienda ha afirmado que dicha factura permitió a B3 Cable «pagar menos impuestos de sociedades» al deducirse una parte de la misma (1,6 millones de los 6,3) y ello pese a que «no cumplía los requisitos para su deducibilidad».
Según ha dicho, esa factura permitió también «sacar fondos» de B3 Cable «por unos servicios que no se prestaron», un dinero que fue a parar a un paraíso fiscal.
OTROS PERITOS
En la quinta y penúltima jornada de juicio, han declarado otros tres peritos que han discrepado de algunas de las afirmaciones hechas por parte del inspector de Hacienda.
Uno de ellos ha sido dedicada uno de los profesionales que, en nombre de una empresa externa contratada por B3 Cable, auditaron las cuentas de de la compañía del ejercicio 2008, dentro de las cuales se incluía esta polémica factura.
Este trabajo concluyó sin que se pusieron ninguna salvedad, pese a que en un inicio esta factura de 6,3 millones llamó la atención de los auditores, que pidieron a la empresa soporte documental y explicaciones sobre la misma.
En su declaración de hoy, este auditor ha defendido el trabajo que se realizó en relación a las cuentas de B3 Cable, una labor que fue, según ha dicho, «compleja» y que requirió de la intervención de diversos profesionales de la compañía especialistas en diversas áreas. «La auditoria no es llegar, ver y marcharse. Hay mucho más trabajo detrás», ha aseverado.
En relación a la factura cuestionada, ha explicado que pidió información sobre la misma y se le mostró el contrato que servía de soporte y las actividades que había realizado Axis Ventura en la operación de comproventa.
También ha relatado que consultó a sus compañeros de la auditoría acerca de si el precio que se había pagado por esos servicios de intermediación era o no razonable y le dijeron que las comisiones por las compras de empresas «pueden ser medianas, bajas o altas». «Ves de todo», ha dicho.
Tras recibir la información requerida sobre la factura, el auditor ha explicado que avisó a B3 Cable de que ésta podía conllevar algún tipo de «riesgo» fiscal y, por ello, pidió a la empresa que en las cuentas de 2008 fuera «transparente» en relación con esa operación, algo que, a su juicio, ocurrió.
En cuanto a la cantidad deducible de esa factura, ha señalado que se estableció que, de esos 6,3 millones, podían ser deducibles 1,6 millones.
Este auditor ha explicado que habló de esa factura «con todos» en B3 Cable, tanto con miembros de la Dirección local como con los directivos británicos.
«Todo el mundo sabe de esa factura», ha dicho el auditor. De esta manera, ha negado que «se apartara» a miembros de la Dirección local de la planta en las conversaciones sobre esa factura, tal y como éstos han señalado en sus declaraciones como testigos.
Por otra parte, han declarado también un economista, experto en valoraciones de empresas, que ha realizado un informe pericial para esta causa.
A diferencia de lo manifestado por el inspector de Haciendo, este economista no ha puesto en duda que Axis Ventura realizara estos trabajos de intermediación. «Entiendo que si los cobró es porque los hace», ha dicho este perito, que, además, ve «razonable» el precio que se pagó.
Además, ha señalado que «se ve» que los servicios de intermediación se llevaron a cabo a la vista del «éxito de la operación», que fue, según ha afirmado, «muy ventajosa» para B3 Cable ya que se adquirió una unidad de negocio con un valor superior al que se pagó por él, independientemente de que posteriormente el negocio se «truncara» por una cuestión «fortuita». «El problema posterior es que las expectivas y el plan de negocio se truncan», ha dicho.
También, y a diferencia de lo manifestado en anteriores jornadas del juicio por los administradores concursales, ha mantenido que «le parece correcto» que fuera B3 Cable España, esto es la planta de Maliaño, la que abonara la factura a Axis.
También, a preguntas de la Fiscalía, ha señalado que alguien que ejerce de intermediario «puede acaba siendo socio» de un negocio como ocurrió en este caso, cuando varios participantes de Axis se convirtieron en administradores de B3 Cable (este es el caso de varios de los exdirectivos británicos acusados).
Y en cuanto a la cantidad de la factura que se consideró deducible, ha opinado que el cálculo de 1,6 millones resulta «bastante prudente» y podría haber sido más.
El otro perito que ha declarado en el juicio ha señalado que la empresa tenía una situación «solvente que se mantuvo hasta 2012», año en el que entró en concurso de acreedores.
Tras las periciales, este jueves acabará el juicio con las conclusiones e informes de las partes y el derecho de los acusados a la última palabra.