Urkullu subraya que negocia las competencias en inmigración para «ampliar y reforzar» el modelo vasco de acogida

Gil pide al lehendakari que «se centre en gestionar bien las competencias que tiene, como Salud y Educación, que son un desastre»

VITORIA, 2

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha explicado este viernes que el Gobierno Vasco está negociando con el central la gestión y financiación de la fase de autonomía e inclusión de las personas solicitantes de protección internacional que, habiéndoles resuelto favorablemente su solicitud, inician un proceso de integración en la comunidad autónoma vasca, ya que su objetivo es «ampliar y reforzar» el modelo vasco de acogida. «Nuestra aspiración es asumir esta competencia para seguir construyendo una sociedad vasca más diversa, más justa y más cohesionada», ha asegurado.

En el pleno de control que está celebrando la Cámara vasca, el parlamentario de Cs José Manuel Gil ha preguntado al lehendakari para qué solicita Euskadi las competencias en inmigración.

Gil ha afirmado «que el nacionalismo ha tenido siempre un trasfondo racista, xenófobo y supremacista» y ha propuesto al lehendakari que en lugar de solicitar nuevas transferencias, «se centre en gestionar bien las que ya tiene, como sanidad y educación, que son un desastre».

Urkullu ha explicado que solicita esta competencia «porque así está recogido en el Estatuto de Gernika y para ofrecer un servicio de mayor cercanía y calidad» y ha explicado que existe una primera fase de acogida y una segunda fase de autonomía e inclusión.

«Estamos negociando la gestión y financiación de la fase de autonomía e inclusión de las personas solicitantes de protección internacional que, habiéndoles resuelto favorablemente su solicitud, inician un proceso de integración en nuestra comunidad», ha detallado.

En este sentido, ha señalado que solicitan la competencia para «acoger, integrar y proteger a las personas» atendiendo a tres principios fundamentales.

Según ha detallado, responde al principio de igualdad y no discriminación, que implica la equiparación de derechos y obligaciones de la población inmigrante y autóctona; el principio de ciudadanía, que implica el reconocimiento de la plena participación cívica, social, económica, cultural y política de los ciudadanos inmigrantes; y el principio de interculturalidad, como mecanismo de interacción entre las personas de distintos orígenes y culturas, en un marco de respeto de la diversidad cultural.

«EUSKADI NO PARTE DE CERO»

El lehendakari ha afirmado que el Gobierno Vasco solicita la competencia para «ampliar y reforzar» el modelo vasco de acogida y ha destacado que «Euskadi no parte de cero en el ámbito de la migración».

«Llevamos más de 20 años construyendo, junto al resto de administraciones vascas, las entidades del tercer sector, y las propias asociaciones de personas de origen extranjero, el modelo vasco de acogida», ha añadido.

Según ha recordado, este modelo incluye un conjunto de recursos para «complementar y completar» el sistema estatal y ha destacado que se están ofreciendo «espacios de participación, servicios y líneas de actuación dirigidas a la población de origen extranjero para garantizar una actuación y una atención individualizada, y acompañar en los procesos de integración».

«Esta semana he tenido la oportunidad de presentar este modelo ante las instituciones europeas. Conocen nuestro trabajo y lo valoran positivamente», ha señalado.

Asimismo, ha insistido en que «Euskadi asume esta competencia para completar toda la política pública de integración» y tiene en cuenta cinco principios.

El primero de ellos es la concepción de la integración como un proceso bidireccional de adaptación mutua; la convicción de que la responsabilidad del proceso de integración y su gestión debe ser compartida por las distintas administraciones, los actores sociales, incluyendo a las personas inmigrantes y el conjunto de la sociedad; y la necesidad de adoptar un enfoque integral o global, tanto en las políticas de inmigración y asilo como de integración.

También defiende la idea de que las políticas de integración se dirigen al conjunto de la ciudadanía inmigrante y autóctona, y que las actuaciones públicas deben ir orientadas a promover y garantizar el acceso normalizado de la población inmigrada a los servicios públicos y privados de carácter general.

Además, apuesta por la incorporación transversal de las cuestiones relativas a la integración de la población inmigrada a todas las políticas públicas relevantes.

«Nuestra aspiración es asumir esta competencia para seguir construyendo una sociedad vasca más diversa, más justa y más cohesionada. Se lo dice el lehendakari de un gobierno de coalición PNV-PSE, expresidente del PNV y militante del PNV», ha concluido.