Candidato Bildu plantea a PNV que lidere el Gobierno Vasco el más votado y se abre a gobernar con los jeltzales
Ve al PSE-EE «con excesivas dificultades para situarse en el nuevo tiempo» y le acusa de defender posiciones de Vox en materia lingüística
BILBAO, 23
El candidato a lehendakari de EH Bildu, Pello Otxandiano, ha planteado al PNV que lidere el próximo Gobierno Vasco la fuerza más votada, y ha dejado la puerta abierta a gobernar con los jeltzales dentro de una nueva política de colaboración que ya se ha emprendido en Navarra.
Se trata, tal como ha explicado, de una «ecuación política», que «excluya a la derecha reaccionaria», con «un bloque de partidos más o menos progresistas», que incluya al PNV, para formar gobiernos de coalición, que puedan tener un apoyo externo de una fuerza política de la oposición.
No obstante, ve al PSE-EE «con excesivas dificultades para situarse en el nuevo tiempo», y le ha acusado de defender en Euskadi posiciones como la que Vox mantiene en Islas Baleares en materia lingüística.
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Otxandiano ha asegurado que EH Bildu sale a las próximas elecciones autonómicas a ganar, con vocación de ser primera fuerza y, por tanto de gobernar, «pero eso lo dirán los ciudadanos».
«Somos una fuerza política con vocación de gobierno y no se trata de alcanzar el poder por ostentar el poder, sino de ocupar responsabilidades de gobierno para poder traccionar procesos de transformación. Hace falta un empuje que ponga a este país en un escenario que se merece y es capaz de afrontar», ha indicado.
Por ello, cree que «es bueno que EH Bildu participe en los gobiernos y se note su impronta en las políticas públicas». En cuanto a futuras alianzas, ha dicho que «se está abriendo un nuevo tiempo en este país» y Navarra y Pamplona son «ejemplo» de ello.
«Ahí se está planteando una ecuación política muy interesante. Se excluye la derecha reaccionaria y se plantea un espacio de colaboración entre las fuerzas progresistas donde gobierna la fuerza más votada», ha manifestado.
En el caso de Navarra, ha recordado que es el PSN, y en Pamplona EH Bildu, y ha subrayado que el PNV «está en esa ecuación en Nafarroa, a través de Geroa Bai», con la que gobierna la formación soberanista en Pamplona. «Ese espacio de colaboración es una política nueva no excluyente, que hay que traer también a estos tres territorios», ha dicho en referencia a la Comunidad Autónoma Vasca, que ahora es «una excepción».
«Hay que normalizar la política y tenemos que pasar de pactos excluyentes a pactos inclusivos que respondan a los intereses y retos de este país, y a nuevas formas de gobernanza mucho más inclusivas», ha subrayado.
Pello Otxandiano ha afirmado que en Euskadi, si PNV es la fuerza más votada, debe liderar el Gobierno vasco, y si la formación soberanista es la primera fuerza, debe ser la que encabece el Ejecutivo.
«Y, después, se pueden articular todo tipo de gobiernos de colaboración y puedan dar fórmulas de coalición, con el apoyo de otra fuerza a la oposición desde fuera sobre un programa, una agenda de país transformadora y progresista. Ahí el abanico puede ser muy amplio, y me parece que es una buena premisa que lidere la fuerza más votada», ha insistido, para incluir al PNV entre esas formaciones de progreso.
PSE-EE
Tras asegurar que no ha hablado con el secretario general del PSE-EE, Eneko Andueza, ha apuntado que «se está abriendo un nuevo tiempo, el guión ha cambiado y que hay que ser capaz de ajustarse o adaptarse a la nueva situación».
«Yo he escuchado a Jesús Eguiguren decir que no puede ser que Pedro Sánchez sea más vasquista que el PSE-EE. Se abre un tiempo en el que podemos llegar a gestionar el carácter plurinacional del Estado de una forma democrática, y eso exige que ese contexto también aterrice en la política vasca», ha explicado.
A su juicio, para eso, los socialistas tiene que «adaptarse un poco a la nueva situación». «Yo le veo al PSE-EE con excesivas dificultades para situarse en el nuevo tiempo», ha remarcado. Preguntado por si apoyaría a Andueza como lehendakari, Pello Otxandiano ha respondido que sí, en caso de que fuera el partido más votado.
Asimismo, cree que es «bastante llamativo que un ministro de Exteriores en España (José Manuel Albares) vaya a Europa para defender la oficialidad del euskara», y el PSE-EE en Euskadi «esté defendiendo posiciones en la cuestión lingüística que son la de Vox en Islas Baleares», lo que supone una «anomalía difícil de explicar».
De esta forma, se ha referido a la nueva Ley de Educación aprobada en el Parlamento vasco, que mantiene los actuales modelos lingüísticos, lo que provocó principalmente que EH Bildu se descolgara de la norma pese a tener «una clara impronta» de la formación soberanista.
EXCLUSIÓN DE LA DERECHA
Para Pello Otxandiano, «el mandato democrático que emana de las urnas en este país está pidiendo que se excluya a la derecha de esa ecuación política», en alusión también al PP. «Excluyendo a la derecha reaccionaria, queda es un bloque de partidos más o menos progresistas, y ahí nosotros incluimos al PNV», ha apostillado.
Por ello, ha subrayado que la formación jeltzale «tiene que ser parte de la agenda transformadora». «Este país necesita un PNV centrado en una agenda transformadora de país y un PNV abertzale. Yo creo que no se puede plantear el desarrollo de este país en el PNV, tiene que ser parte de la ecuación a la hora de plantear la gobernabilidad de este país», ha enfatizado.
A su entender, si todos hacen «el ejercicio de situarse en este nuevo tiempo, es posible legar a acuerdos fundamentales amplios que respondan al centro de gravedad de la sociedad, que es mayoritariamente vasquista, y está a favor del euskara».
PRESUPUESTOS DE VITORIA
Otxandiano ha reconocido que «hay una posibilidad» de que EH Bildu apoye los presupuestos del Ayuntamiento de Vitoria, gobernado por PSE-EE y PNV, «pero hay que ver». «Nosotros tenemos absoluta disposición a llegar a un acuerdo porque este país necesita de acuerdos amplios sobre programas transformadores que respondan a las necesidades de la ciudadanía», ha indicado.
Los acuerdos que están suscribiendo también en leyes del Parlamento Vasco, como la Ley de Transición Energética o la de Infancia, tal como ha asegurado, «en ningún caso» responden al tacticismo. «Ese relato que plantea que EH Bildu se sitúa en el acuerdo por interés electoral, no tiene mucha consistencia», ha subrayado.
En este sentido, ha defendido que mantienen la misma postura que en el resto de la legislatura, de forma que cierran acuerdos «si son buenos para la gente».
OSAKIDETZA
El candidato a lehendakari de EH Bildu ha apostado por levantar en cuatro años a Osakidetza, y cree que en estos momentos los dos problemas más graves que tiene son «la falta de planificación y una mala política de contratación de personal», aunque ha admitido que no puede resolverse «de un día para otro».
«Pero hay cuestiones que son prioritarias. En las listas de espera hay que actuar con contundencia y reforzar la atención primaria», ha resaltado. Posteriormente, se plantearán reformas estructurales «que llevarán su tiempo».
En el ámbito económico, ha señalado que las transformaciones «implican una reconversión de buena parte del tejido productivo». Según ha indicado, hay «algunos síntomas preocupantes», como «el desarraigo de buena parte del tejido industrial y de empresas tractoras en los últimos años».
Por ello, cree que hace falta que «el sector público sea capaz de direccionar la economía, de identificar sectores con propósito y de plantear una colaboración público-privada», pero en el que «el sector público tenga el papel director».
También se ha referido a la instalación de parques eólicos, que «tienen una afección en el territorio», para explicar que «hay que hacerlo con la gente, de forma ordenada y equilibrada»