Arévalo escenifica la asunción del mando del Ejército de Guatemala
El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, ha recibido este lunes el bastón de mando que le acredita como comandante en jefe del Ejército del país centroamericano, cargo que ejerce desde que tomó posesión este domingo.
«Los días en que sectores del poder político y la oficialidad militar se aliaban para respaldar regímenes políticos autoritarios ha llegado a su fin», ha proclamado Arévalo durante el acto militar con unos 21.000 soldados.
«Los generales de ahora forman parte del alto mando han sido seleccionados y evaluados, no solo por su trayectoria profesional, sino también por su compromiso con la democracia. De ahora en adelante los procesos de nombramiento en las filas militares representan una modernidad arraigada en principios democráticos sólidos», ha resaltado, según recoge la radio Emisoras Unidas.
Arévalo ha anunciado además que ha ordenado a las autoridades competentes elaborar diagnósticos y planes que permitan avanzar en la modernización de las capacidades del Ejército, con equipamiento, movilidad, armamento y comunicaciones.
El Ejército de Guatemala ha rendido honores al nuevo mandatario en un escenario inusual y rompiendo el orden tradicional. El acto se ha llevado a cabo en la plaza de la Constitución, no en la Brigada Militar Mariscal Zavala, como era tradición.
Arévalo ha recibido el homenaje de los 21 cañonazos, una tradición arraigada en las salvas disparadas por los barcos como garantía de paz al acercarse a puerto.
En la tribuna presidencial situada frente al Palacio Nacional de la Cultura se ubicaron el presidente y vicepresidenta de Guatemala, Bernardo Arévalo y Karin Herrera acompañados por el ministro de la Defensa, Henry David Sáenz Ramos, ministros y secretarios de Estados y representantes militares.
Unos 21.000 militares han participado en un acto que ha comenzado con el himno nacional de Guatemala interpretado por la Banda Sinfónica Marcial y el paso de la bandera nacional para continuar con la invocación a Dios en la que se pidió «sabiduría» para que las nuevas autoridades puedan gobernar el país.
El ministro de Defensa, Sáenz Ramos, ha subrayado al presidente y a la población que la «disciplina y la obediencia del Ejército de Guatemala permanecerán incólumes». Además ha pedido a la sociedad y a la comunidad internacional que confíen en que el Ejército respeta la democracia, los Derechos Humanos y la dignidad de las personas.
Arévalo tomó posesión el domingo tras una serie de retrasos provocados por la paralización de la instauración del nuevo Congreso guatemalteco. Previamente el Ministerio Público había puesto en duda los resultados de las elecciones de junio y agosto de 2023 en las que fue elegido presidente a pesar del aval internacional a los comicios.