La OMS consigue entregar suministros a un hospital del norte de Gaza por primera vez en más de dos semanas
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha conseguido este jueves entregar combustible y suministros médicos al hospital Al Shifa, en el norte de la Franja de Gaza, después de que Israel llevara más de dos semanas sin autorizar las misiones de sus trabajadores en esta zona del enclave.
«Después de más de dos semanas, el equipo y los socios de la OMS han podido llegar hoy al hospital Al Shifa y entregar 9.300 litros de combustible y suministros médicos para atender a mil pacientes de con traumatismos y un centenar de pacientes de diálisis renal», ha especificado el director del organismo de la ONU, Tedros Adhanom Ghebreyesus, a través de su perfil en la red social X, anteriormente conocida como Twitter.
Tedros ha explicado que Al Shifa, que había sido el principal hospital de Gaza, ha restablecido parcialmente sus servicios, lo que «significa que el consumo de combustible es mucho mayor y la necesidad de suministros médicos está aumentando». Por ello, ha pedido un «acceso sostenido y seguro» para seguir entregando suministros médicos, combustible, alimentos y agua».
El hospital cuenta ahora con 60 empleados médicos, una sala quirúrgica con 40 camas, cuatro quirófanos, una sección de emergencias, servicios básicos de emergencia obstétrica y ginecológica, una unidad de hemodiálisis limitada y servicios mínimos de laboratorio y radiología. «Insistimos una vez más en que la salud debe protegerse y nunca ser un objetivo ni militarizarse», ha subrayado.
En la víspera, Tedros hizo un llamamiento a Israel para que autorizase la entrada de sus trabajadores al norte de la Franja de Gaza, después de haber tenido que cancelar hasta seis misiones previstas desde el 26 de diciembre porque sus solicitudes habían sido rechazadas y no habían obtenido garantías de paso seguro. Así, subrayó que el principal obstáculo para la entrega de ayuda no es la falta de capacidades de la ONU o sus agencias, sino el acceso.
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) lanzó a comienzos de octubre una serie de ataques que dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 240 secuestrados. El Ejército de Israel respondió con una cruenta contraofensiva contra la Franja de Gaza que se cobra ya más de 23.400 vidas palestinas. A eso se suman más de 330 muertos en operaciones de las fuerzas de seguridad y ataques por parte de colonos en Cisjordania y Jerusalén Este.