Lobato apunta que «aún no están cerrados» los equipos de los ministerios y que el PSOE-M podría tener alguna salida más
Destaca la integración de Mar Espinar en la dirección del Grupo Parlamentario y señala que tendrá un «papel importante»
El secretario general del PSOE-M, Juan Lobato, ha apuntado que los equipos de los ministerios «aún no están cerrados» y que el Grupo Parlamentario Socialista podría tener alguna salida más.
Lo ha señalado en una entrevista con Europa Press al ser preguntado por la marcha de la que fuera su portavoz adjunta Llanos Castellanos al Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana y el diputado y responsable de Seguridad y Emergencias en el partido Guillermo Martín, quien se incorporará previsiblemente este enero también al Ejecutivo central tras renunciar en diciembre a su acta.
Ha reconocido que cuando conformó su candidatura buscaba perfiles «muy potentes» a los que pidió que dieran un «paso al frente», pero era consciente de que tendrían «llamamientos posiblemente para otras responsabilidades».
«Como además los ministros son amigos, te llaman y te piden los favores de esa manera, en este caso las ministras», ha añadido el secretario general de los socialistas madrileños, quien considera positivo que el PSOE-M tenga un «peso específico» en el Gobierno de España. De hecho, con la salida de Castellanos argumentó que era importante que la voz madrileña sonase en las políticas de Vivienda del Ejecutivo central.
Al hilo, ha destacado que además de seis ministros de la región hay «un número altísimo» de Secretarías de Estado o puestos de la máxima responsabilidad en empresas públicas en manos de madrileños. Además, ha asegurado que ellos están «apoyando y construyendo» el proyecto del PSOE-M.
ASCIENDE MAR ESPINAR, ANTIGUA PORTAVOZ DEL PSOE EN CIBELES
Lobato ha indicado que en la conformación de este Ejecutivo central está habiendo un «decalaje mayor» al haber cambiado el Ministerio de Economía de Nadia Calviño a Carlos Cuerpo y no poder arrancar hasta entonces «la reconfiguración de ciertos ámbitos». «Tampoco hay nada claro, pero sí que hay algunos perfiles que, sin duda, van a estar en algunas de las decisiones de nombramiento que haya», ha apostillado.
La salida de Castellanos dejó vacante en el Grupo Parlamentario una Portavocía Adjunta que ha ocupado la secretaria de organización del PSOE-M, Marta Bernardo. En esta reestructuración de la dirección de Grupo Parlamentario se ha integrado además a la diputada Mar Espinar.
Espinar fue la portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Madrid tras la renuncia de Pepu Hernández y formó parte de la candidatura de Lobato a la Asamblea de Madrid mientras que el puesto que ostentaba fue ocupado por Reyes Maroto. En su caso, Lobato ha asegurado que tendrá un «papel importante» en la dirección del Grupo Parlamentario de la Asamblea y también en las sesiones de control al Gobierno en el Pleno.
«Tenemos perfiles muy versátiles y diferentes para el tono que tiene que ser de nuestra oposición, que es fiscalización contundente y seria, a la vez que proponemos nuestro modelo alternativo. Gente como Marta, por supuesto, como Mar Espinar y otros diputados y diputadas que tenemos pueden hacer muy bien ese tono de fiscalización dura y contundente», ha expuesto el líder de los socialistas en la Cámara de Vallecas.
VE BAJADA DE CRISPACIÓN EN LA ASAMBLEA DESDE LA SALIDA DE GARCÍA
Confía Lobato en que el debate en la Asamblea va a ser «más de Madrid» y menos de «insulto del uno contra el otro» después de que se «dieran nuevas cartas» tras el nombramiento de la entonces portavoz de Más Madrid como ministra de Sanidad, Mónica García.
Cree que en seis meses ha habido «diferentes dinámicas» en el parlamento regional porque se empezó «bastante mal» y con «insultos muy graves» entre Más Madrid y PP.
«Yo creo que se dio un espectáculo lamentable en varios plenos por parte de unos y de otros, casi diría de una y de otra. La cosa fue un enfrentamiento personal en un tono muy duro y muy poco edificante», ha lanzado.
Para Lobato, la presidenta autonómica, Isabel Díaz Ayuso, lo tiene «más difícil», ya que vive «muy cómoda en el insulto, el ataque y la provocación». Ha asegurado que con él «no es tan sencillo que entre al trapo o baje al barro» y que ha acabado «desistiendo».
«Igual que yo sé que no la voy a ganar en el insulto, y entre otras cosas por eso no insulto, porque no me sale ni quiero y porque sé que pierdo, pues ella a mí no me va a ganar en la propuesta», ha concluido Juan Lobato.