El PP ve en el ascenso de Montero que Sánchez busca el «choque» aunque cree que Puigdemont es el vicepresidente primero
El PP ha reaccionado este viernes a los cambios anunciados por Pedro Sánchez en el Gobierno tras la marcha de Nadia Calviño considerando el ascenso de María Jesús Montero a vicepresidenta primera una muestra de que el jefe del Ejecutivo busca el «choque» con el principal partido de la oposición y ha sostenido que se trata de una vicepresidencia «simbólica» porque el «verdadero» es el expresidente de Cataluña y líder de Junts, Carles Puigdemont.
Fuentes del PP apuntan al hecho de que la actual ministra de Hacienda –ya vicesecretaria general del PSOE, número dos del partido– será a partir de ahora también la segunda en el escalafón del Gobierno en sustitución de Calviño, que sale del Ejecutivo para presidir el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
En este sentido, los de Alberto Núñez Feijóo hacen hincapié en que la portavoz del Gobierno y ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, Pilar Alegría, es también la portavoz nacional del PSOE.
Algo que, a su juicio, supone «la demostración de que Sánchez quiere un gobierno de trinchera y más preocupado por ir al choque con el PP que por dignificar la gestión pública».
Para el PP, la vicepresidencia primera es una responsabilidad «simbólica» en el actual Gobierno porque «el verdadero vicepresidente primero, aunque no se sienta en el Consejo de Ministros, lo controla desde Suiza y lo vigila desde Bruselas», en alusión a Puigdemont, socio de investidura de Sánchez.
El PP considera esta remodelación del Ejecutivo una «oportunidad perdida» para reducirlo, ya que mantiene el «mismo número de integrantes, mismo número de nóminas, de coches, de asesores…».
Además del ascenso de Montero, que venía ejerciendo de vicepresidenta cuarta, Sánchez ha anunciado que el hasta ahora secretario general del Tesoro Público y Financiación Internacional, Carlos Cuerpo, sucederá a Calviño al frente del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa.