Sordo (CCOO) dice que la reforma del subsidio incluye mejoras, pero avisa de «algunas insuficiencias»
El secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha afirmado este martes que la reforma del subsidio por desempleo diseñada por el Gobierno y que no ha contado con el acuerdo de los agentes sociales, conlleva mejoras en el tratamiento de estas ayudas, pero contiene también «algunas insuficiencias».
Sordo, en declaraciones al Canal 24 horas recogidas por Europa Press, ha denunciado que la reforma «no recoge lo suficientemente bien la igualación de derechos con las personas que tienen contratos a tiempo parcial».
«En todo caso, vamos a ver finalmente cómo aparece en el Boletín Oficial del Estado, porque hasta donde yo sé, esta misma mañana se estaban negociando los últimos flecos del texto que va al BOE», ha señalado Sordo.
Frente al argumento de que el subsidio desincentiva la búsqueda de empleo, el dirigente de CCOO ha subrayado que las prestaciones de desempleo y sobre todo los subsidios, cuya cuantía es de 480 euros, «no son un elemento que desincentive la búsqueda de un puesto de trabajo».
«Y los subsidios de desempleo, como las prestaciones de desempleo, lo que tienen que hacer fundamentalmente es proteger a los cientos de miles o los millones de personas que queriendo trabajar no pueden hacerlo y que están en una situación, por tanto, de mucha vulnerabilidad. Esta es la función principal de un subsidio y, por tanto, lo que hay que hacer es asentar esos niveles de protección», ha defendido.
Sordo ha indicado que esta política de protección no debe confundirse con las políticas de empleo destinadas a facilitar que los desempleados, a través de procesos de formación y de orientación laboral, encuentren un empleo, políticas éstas últimas que, para el líder de CCOO, son «manifiestamente mejorables en España».
«Pero no deben confundirse las dos cosas porque si no, se lanza el equívoco de que aquí hay 2.700.000 personas que no trabajan, que están en las listas del desempleo y no lo hacen, no tanto porque no encuentran un puesto de trabajo, sino porque hay una especie de renta que les desincentiva a trabajar. Esta idea no puede quedar en la sociedad española porque es errónea», ha argumentado.
Sordo ha añadido que lo que desincentiva a efectos prácticos «es lo que uno va a cobrar por un contrato parcial o por un contrato precario» y no las prestaciones y los subsidios.
«Creo que nadie que esté cobrando 480 euros al mes está en esa situación (de no querer un empleo). Otra cosa es que a veces se oferten empleos que no son declarados para permitir a algunas personas cobrar un subsidio y a la vez trabajar en B , pero ahí lo que hay que hacer es perseguir la economía sumergida y los contratos en fraude de ley y las no cotizaciones a la Seguridad Social. Que no pague el pato quien está cobrando el subsidio», ha añadido.
Sordo ha indicado que los sindicatos sí estaban dispuestos a hablar de la compatibilidad entre subsidio y empleo, medida que incluirá la reforma, pero no a aceptar recortes en las ayudas. La idea sindical, ha explicado, era la de mejorar el universo de beneficiarios, las condiciones de igualdad de acceso al subsidio y las cuantías.