Investigadores del IA2 descubren que moléculas presentes en aceites vegetales son útiles contra la gonorrea
ZARAGOZA, 27
Un estudio dirigido por el investigador del Instituto Agroalimentario de Aragón (IA2) –centro mixto de la Universidad de Zaragoza (UZ) y el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA)– detalla el descubrimiento de aceites esenciales extraídos de pino y limón que inactivan la bacteria causante de la gonorrea en humanos, así como aceites de orégano que lo hacen frente a streptococus suis , un patógeno de cerdos y humanos.
En el trabajo han participado también Paula Jurado, Cristina Uruén y Sara Martínez –IA2-UZ–; Elena Lain y Antonio Arezusta –Hospital Miguel Servet de Zaragoza–; Sandra Sánchez –Universidad de Santiago de Compostela–; y Víctor López –Universidad de San Jorge–, ha informado la UZ.
El trabajo, publicado por la prestigiosa revista científica Biomedicine Pharmacotherapy en su número de octubre, ha encontrado que Neisseria gonorrhoeae , una bacteria resistente a múltiples antibióticos comúnmente conocida como gonococo , es, sin embargo, sensible a aceites extraídos del pino y del limón.
Por tanto, estos compuestos podrían ser una alternativa al uso de antibióticos contra la bacteria causante de la gonorrea, que es la segunda enfermedad de transmisión sexual a nivel mundial con 87 millones de casos estimados en 2016, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Aunque pueda tratarse, esta bacteria está desarrollando rápidamente un gran número de resistencias a antibióticos y no existe vacuna para su prevención. La OMS estima que en 2050 no habrá tratamiento posible, por lo que ha calificado de urgente la búsqueda de nuevas terapias.
LA INVESTIGACIÓN
Esta investigación ha analizado la actividad de siete aceites extraídos de diferentes plantas contra aislados clínicos del gonococo resistentes a múltiples antibióticos.
De esta forma, los aceites de pino y limón han mostrado una elevada capacidad bactericida contra diferentes cepas y capacidad de dispersar asociaciones de microorganismos, denominados como biofilms , mecanismo que las bacterias utilizan para tolerar los antibióticos. «Aquí buscamos alternativas en los sistemas de defensa que utilizan las plantas contra infecciones bacterianas», ha explicado Jesús Arenas.
Los autores han analizado el mecanismo de acción de los aceites usando una diversidad de técnicas microscópicas y estudios de la fisiología bacteriana para poder entender su efecto sobre el gonococo , que pertenece al grupo de bacterias Gram negativas cuya cubierta está formada por dos membranas, lo que la hace especialmente resistente a los antibióticos.
Así, los aceites de pino y limón han actuado sobre la membrana externa de la bacteria, que es una estructura esencial para su supervivencia.
Ambos aceites atacan directamente al lipopolisacarido , un lípido únicamente presente en este tipo de microorganismos. Aunque los aceites tienen casi cien componentes «nosotros mostramos que particularmente dos, pineno y limoneno, actúan directamente sobre la célula bacteriana y podrían contribuir en gran medida a la actividad de los aceites», ha comentado el científico.
ACEITES DE ORÉGANO CONTRA UNA SUPERBACTERIA QUE TRANSMITEN LOS CERDOS
Por otro lado, los investigadores también han encontrado que los aceites de orégano muestran actividad contra la bacteria de cerdos Streptococcus suis , un patógeno que causa graves daños a estos animales incluyendo meningitis, artritis y endocarditis.
Este patógeno también puede causar infecciones muy graves en personas y se ha propuesto que puede traspasar genes de resistencia a otros patógenos de humanos, contribuyendo así a la dispersión de resistencias. No existen vacunas efectivas y se ha convertido en un patógeno «multirresistente» a antibióticos, por lo que es un problema tanto de salud animal como de salud pública.
Dado que España es el mayor productor de carne de cerdo de Europa y el tercero del mundo, con Aragón como la primera autonomía productora, el Streptococcus suis es un agente que contribuye a un gasto económico muy importante en el sector porcino.
En resumen, los aceites de plantas o sus derivados podrían ser útiles para generar nuevas alternativas a antibióticos. «Ensayos preliminares en animales de experimentación, todavía no publicados, ya han mostrado resultados prometedores», ha señalado el inestigador, quien ha añadido que «su actividad en vivo debe ser estudiada en detalle, pero muy posiblemente puede ser extensible a otras superbacterias, lo cual justifica su estudio».