IU presenta ante la CPI un informe sobre «crímenes de guerra» de Israel y plantea denunciar a Netanyahu
Izquierda Unida ha presentado en la Corte Penal Internacional un informe sobre crímenes de guerra, de lesa humanidad y violaciones de derechos humanos que imputan a Israel en Gaza en su respuesta militar al ataque de Hamás, además de anunciar que se plantea presentar una serie de denuncias contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y «el resto de sus cómplices».
El eurodiputado Manu Pineda ha sido el encargado de entregar el informe al reunirse con responsables de la oficina del fiscal para Asuntos Palestinos de la CPI, con sede en La Haya, según ha comunicado este viernes la formación.
De 30 páginas, el informe recoge los «más de 14.000 gazatíes asesinados» desde el pasado 7 de octubre, fecha del inicio del conflicto tras el ataque sorpresa de Hamás. Apunta que más de 5.900 de los fallecidos son niños y niñas, más de medio centenar son periodistas y más de cien son trabajadores de Naciones Unidas.
Para IU, Israel ha cometido «crímenes susceptibles de ser juzgados» por la CPI, entre ellos «castigo colectivo contra la población de Gaza por la prohibición de entrada de alimentos y medicina, violaciones físicas continuadas en Jerusalén y Cisjordania, uso de armas prohibidas, destrucción de instalaciones civiles, y ataque y asesinato deliberado de civiles». Por ello,
IU solicita al tribunal que adopte medidas y juzgue a «los responsables» y ha señalado que la Fiscalía estudiará la documentación que le han facilitado.
Pineda ha manifestado que está satisfecho con el resultado del encuentro y ha asegurado que la Corte les ha trasladado que tienen dificultades para investigar la situación en Gaza sobre el terreno porque Israel no les permite acceder, pero cree que hay «pronunciamientos y evidencias suficientes para sentar en el banquillo a los criminales».
IU ha precisado que aunque Israel no es parte de la CPI, el tribunal puede abrir un procedimiento contra ciudadanos de países no miembros, tal y como sucedió con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, sobre el que pesa una orden de arresto internacional por la invasión de Ucrania.