La industria pide un nuevo modelo de gobernanza industrial y una Secretaría de Estado para el sector
La Alianza por la Competitividad de la Industria Española ha pedido al futuro Gobierno un nuevo modelo de gobernanza industrial para «garantizar la autonomía estratégica del país, un crecimiento sólido y sostenible de la economía y la generación de empleo de calidad», así como una Comisión Delegada del Gobierno en Política Industrial y la instauración de una Agencia Estatal y una Secretaría de Estado de Industria.
En un comunicado, la asociación advierte de que la gran industria «se enfrenta a múltiples retos», con una competitividad «lastrada por unos desproporcionados costes energéticos, una intensa y cambiante sobrerregulación plagada de solapamientos y lentos procedimientos burocráticos, la ausencia de neutralidad tecnológica o una elevada presión fiscal», entre otros.
Además, indica que la política industrial española necesita una nueva gobernanza que permita la completa coordinación del Gobierno para «adoptar las medidas necesarias que impulsen de forma efectiva la competitividad y el crecimiento verde del tejido productivo español», lo que permitiría disponer de una economía «más sólida, avanzada y sostenible, preparada para hacer frente a los retos del futuro y a las tensiones geoestratégicas, y capaz de generar empleo de mayor calidad».
La asociación -integrada por patronales que representan a diferentes sectores industriales; como Anfac (automoción), Sernauto (componentes de automoción), FIAB (alimentación y bebidas), AOP (refino), Oficemen (cemento), Primigea (materias primas minerales), Aspapel (papel), Feique (química y farmacia) y Unesid (siderurgia)- consideró que «se visualiza un problema de gobernanza que acaba por desfigurar la eficacia de la política industrial en su conjunto».
A este respecto, aseguró que la negativa de los sucesivos ejecutivos a elevar la Secretaría General de Industria a Secretaría de Estado «es un termómetro evidente -pero solo la punta del iceberg- del nivel de prioridad que los gobiernos otorgan al desarrollo competitivo de su tejido productivo».
La Alianza subraya también que en una política considerada de «evidente carácter estratégico» para el país, como la industrial, el hecho de otorgar un rango de Secretaría de Estado al departamento responsable de su ejecución le permitiría, por ejemplo, participar en la Comisión General de secretarios de Estado y subsecretarios, encargada del análisis y preparación de los asuntos que se someten a deliberación en el Consejo de Ministros.
Asimismo, añade que su propuesta de contar con una Comisión Delegada del Gobierno para la Política industrial, ofrecería un órgano «con capacidad para coordinar la actuación de los diferentes departamentos ministeriales con competencias en ámbitos que afectan a la industria».
Igualmente, la Alianza indica que disponer de una Agencia Estatal daría la posibilidad de tener un organismo que podría gestionar los incentivos a la inversión, agilizar mediante procedimientos de ventanilla única proyectos estratégicos industriales o facilitar el desarrollo de proyectos de innovación que respondieran a las necesidades de las empresas, e instituir observatorios de competitividad internacional y de vigilancia normativa, entre otros.