Venezuela acusa a Guyana de rechazar el diálogo sobre Esequibo por ser «servil» con la petrolera Exxon
El Gobierno de Venezuela ha reprochado este domingo al Gobierno de Guyana su rechazo a abrir negociaciones de alto nivel ejerciendo una posición «arrogante y hostil» que achaca a su «conducta servil» con la petrolera Exxon Mobil. Además, denuncia exploraciones petroleras «en áreas marítimas incontestablemente venezolanas».
Guyana en cambio aboga por una resolución del contencioso territorial con Venezuela a través de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) con sede en La Haya y recuerda que el último intento de negociación mediado por el secretario general de la ONU, António Guterres, concluyó sin avances significativos.
«La posición arrogante y hostil de Guyana, negando el diálogo y la diplomacia, es el mayor obstáculo para alcanzar una solución en el marco del Derecho Internacional Público. El tutelaje de las empresas transnacionales se ha convertido en un peligroso estímulo a la perturbación de la paz regional y el incumplimiento de las obligaciones internacionales de este país, a esto se suma la conducta temeraria y provocadora de asociación con el Comando Sur de los Estados Unidos de América, para instalar bases militares en la zona en reclamación», ha planteado Venezuela en su último comunicado.
Además, Caracas reclama que «Guyana ha desplegado una serie de acciones ilícitas para disponer de áreas marítimas que están pendientes de delimitación, otorgando licencias de exploración en dichas áreas». «Esta situación ha llegado al extremo de realizar exploraciones, junto a la Exxon Mobil, en áreas marítimas incontestablemente venezolanas», ha destacado. En ese sentido, denuncia la «conducta servil a los intereses de la Exxon Mobil» y pide que «detenga la militarización de la zona».
Venezuela apela de nuevo al Acuerdo de Ginebra de 1966 y al Derecho Internacional por el que Guyana «está obligada» a sentarse en la mesa de negociación.
El pasado viernes Guyana publicó un comunicado en el que plantea que «Venezuela ha olvidado que en 2018 utilizó más de dos décadas de buenos oficios para nada debido principalmente a sus tácticas dilatorias». Así, señala que Guterres derivó el contencioso a la CIJ.
La CIJ abrió un caso a petición de Guyana en 2018 y desde entonces se ha pronunciado para declararse como competente al respecto, a pesar del rechazo de Venezuela a este proceso judicial.