Consorcios público-privados proponen desarrollar la geotermia en Tenerife, Gran Canaria y La Palma
Involcan apela a descubrir si las islas tienen «la gallina de los huevos de oro» y cree que podría haber centrales operando en 2030
SANTA CRUZ DE TENERIFE, 25
Los cabildos de Tenerife, Gran Canaria y La Palma, a través de consorcios público-privados, han iniciado diversos proyectos para promover el desarrollo de la geotermia en las islas a través de la solicitud de permisos de investigación al Gobierno de Canarias y ayudas económicas al Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), entidad dependiente del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico.
Los detalles de estas iniciativas han sido expuestos en rueda de prensa este lunes por el consejero de Innovación, Investigación y Desarrollo del Cabildo de Tenerife, Juan José Martínez; el consejero de Desarrollo Económico, Energía e I+D+i del Cabildo de Gran Canaria, Raúl García; el consejero de Hacienda, Recursos Humanos, Comercio, Formación, Empleo, Industria y Energía del Cabildo de La Palma, Fernando González y el director científico del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), Nemesio Pérez.
Este ha defendido que el capital privado entre en los proyectos «sin exclusiones» y ha defendido las bondades de la geotermia como un recurso «renovable, sostenible, estable y disponible 24 horas», con un «rendimiento predecible» y que «opera continuamente», con la posibilidad de generar reclamos turísticos a partir de los residuos de las centrales, como ocurre con un lago en Islandia.
No obstante, ha advertido de que «hay que cazar el oso antes de venderlo» y deja la puerta abierta a que cuando se hagan los sondeos no haya recurso energético o «no sea viable» su explotación, pero en todo caso, descarta que «entierren» millones de euros dado que la sociedad correr el riesgo de saber si tiene «la gallina de los huevos de oro» bajo sus pies.
«Canarias es la única zona de España con recurso de alta entalpía y o nos pegamos 40 años más esperando o nos ponemos trabajar», ha agregado, subrayando que si se localizan recursos energéticos antes de 2026, con un plazo aproximado de unos cinco años más, una central geotérmica podría entrar en uso en 2030 o 2031.
Pérez ha comentado que entre los cabildos y el Gobierno canario se han invertido unos siete millones en estudios desde 2008 y ahora se trata de «compartir el riesgo» del coste con las empresas privadas, que es muy alto en la fase de sondeo y muy bajo si se encuentra el recurso.
Para ello ha apuntado que hay que hacer sondeos de al menos dos kilómetros de profundidad –los realizados hasta el momento no pasaban del kilómetro–.
AZORES, UN MODELO A SEGUIR
El director de Involcan ha puesto como ejemplo la central geotérmica de Azores, en la isla de San Miguel, con unos 120.000 habitantes, y responsable de más del 40% de la generación de electricidad en la isla.
Juan José Martínez ha detallado que la isla ha presentado proyectos por casi 100 millones de euros en el oeste, sur y sureste de la isla de la mano del ITER, Involcan y DISA y entiende que estos proyectos ayudarán a la soberanía energética de la isla en un momento de «emergencia» y con amenaza de apagones.
Ha apuntado que hay «indicios sólidos» de que en las tres islas se puede explotar la energía geotérmica, con un coste inicial de unos 30 millones de euros y otros 180 millones, aproximadamente, si se puede explotar.
Fernando González ha valorado que la energía geotérmica es «constante y gestionable» pues es una renovable que no se ve afectada por los fenómenos meteorológicos, y en el caso de La Palma, podría alcanzar una potencia instalada de 20 megawatios.
Ha dicho que el interés por la goetermia «no es algo nuevo a colación de la erupción» en Cumbre Vieja pues hay estudios hechos desde los años ochenta que no fructificaron porque «los sondeos son muy caros».
MAZO Y FUENCALIENTE
Ahora, el Cabildo concurre con proyectos valorados en unos 60 millones en las zonas de Mazo y Fuencaliente a través de Sodepal, el Consejo Insular de Aguas, la cooperativa de energía y la comunidad de aguas Canopalma.
González señala que la participación aún «está abierta» para que entren empresas privadas que «tengan el know how » que el Cabildo no pueda prestar por sí mismo.
García, por su parte, ha destacado la «colaboración intensa» con el Involcan para acompañar al Cabildo de Gran Canaria en el desarrollo de la geotermia, que coincide con el modelo de «ecoisla» que defiende el equipo de gobierno en busca de la soberanía energética a través de las renovables.
Por ello han presentado proyectos por importe de casi 31 millones en un arco comprendido entre Telde y Valsequillo, al este de la isla, con una iniciativa público privada conformada por el Ente Público Empresarial Consejo Insular de la Energía, Canaluz Infinita, Ayagaures Medio Ambiente y Canary Islands Base, del Grupo Satocan.
«Creemos que vamos a superar los desafíos técnicos y regulatorios y los proyectos estarán finalizados antes de que acabe 2026», ha indicado, resaltando también que la geotermia es una «alternativa prometedora» para producir energía «limpia y abundante» y ayudar a la lucha contra el cambio climático.
Las ayudas del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) suponen un total de 120 millones con cargo a los fondos Next Generation y la mitad, 60 millones, se destinan a Canarias, a razón de 15 millones por isla.