La UIMP se despide de «un gran verano» con menos cursos pero más alumnos

Ha tenido 4.676 estudiantes y 1.851 ponentes de 43 nacionalidades

La Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) ha clausurado este jueves, de forma oficial, la actividad académica estival que imparte en su sede de Santander, ceremonia con la que pone el «broche final» a un «gran verano», en el que ha habido «algunos» cursos menos que en el anterior, pero más alumnos, que era uno de los objetivos marcados.

En concreto, las aulas de la UIMP han acogido entre junio y septiembre a 4.676 estudiantes, la gran mayoría (4.080) en las clases del Palacio de la Magdelena, y a los que se suman 597 más en el campus de Las Llamas.

Los datos los ha aportado en el acto de clausura el rector, Carlos Andradas, quien ha valorado que ha habido más asistentes por cada curso y ha destacado también los 1.851 ponentes de 43 nacionalidades, algo que da «significado pleno» al carácter internacional de la Menéndez Pelayo.

A los profesores y alumnos se suman también los «miles» de asistentes a las actividades culturales organizadas durante doce semanas, en esta edición de la UIMP, que ha colaborado con el Festival Internacional de Santander (FIS), entre otras citas y espacios.

El verano arrancó, como ha recordado el rector, con la «triste» noticia de la muerte de Nuccio Ordine, premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades de 2023 y que iba a impartir un curso magistral en la UIMP, y ha estado marcado además por la convocatoria de elecciones generales el 23 de julio y por la Presidencia Española de la Unión Europea, que incluyó una cumbre de ministros en el Palacio de la Magdalena. Estas citas obligaron a restringir la programación e incluso a cancelar algún curso.

Pese a todo ello, en la Universidad están «contentos y satisfechos», como ha admitido su rector, a la par que ha advertido de que «aspiramos a crecer» de cara al próximo año, no tanto en la cantidad de los cursos como en la calidad de los mismos, contando para ello con los «mejores» ponentes, lo que a su vez redundará en un mayor número de estudiantes.

Así, al tiempo que cierra la actividad académica de 2023, la UIMP trabaja ya en la de 2024, con el objetivo de lograr una programación que «llegue a todos los rincones» de España, ya que el fin último de la institución es que «siga brillando e iluminando a la sociedad».

Y en paralelo, tratará de mejorar el programa de becas y de recabar también más ayudas, pues no ha sido un año «fácil» desde el punto de vista presupuestario y de patrocinadores, tal y como ha admitido Andradas, que lleva dos veranos al frente de la UIMP y que aspira a situarla «lo más alto posible» y a que «brille en todo su esplendor».

El rector ha aprovechado su intervención para repasar las materias más relevantes que se han impartido durante estos tres meses y los participantes más destacados.

El acto de clausura de los cursos de este verano ha coincidido con el de investidura como doctora honoris causa de la escritora Siri Hustvedt, Premio Princesa de Asturias de las Letras 2019, que ha estado amadrinada por Isabel Durán Giménez-Rico, catedrática de Literatura Norteamericana de la Universidad Complutense de Madrid.

APOYO DEL GOBIERNO

También ha intervenido en la ceremonia final la presidenta del Gobierno regional, María José Sáenz de Buruaga, quien ha subrayado la «enorme trascendencia» que para Cantabria tienen las universidades y ha felicitado a la Menéndez Pelayo por el programa «tan exitoso» de 2023, con el que ha cerrado un «magnífico» verano.

Y tras recordar que la UIMP ha celebrado su 90 aniversario y empieza «la cuenta atrás» hacia el centenario, la jefa del Ejecutivo ha resaltado lo que la Menéndez Pelayo aporta a la comunidad autónoma y al conjunto del país.

«Esta Universidad es una proa, de la política cultural, educativa e internacional de España», ha subrayado Buruaga, que ha puesto como ejemplo de esto el nombramiento de Hustvedt y ha reconocido que la UIMP «ha dado mucho a Cantabria y tiene que dar aún mucho más, porque hay recorrido para ello».

Así, al haber «posibilidad» y combinarse con «voluntad», Buruaga ha afirmado que «los recursos habrán de venir naturalmente» para este proyecto, al que ha ofrecido el apoyo, colaboración y «mano tendida» del Gobierno que preside, para «seguir avanzando e innovando en esta experiencia de educación e internacionalidad que en 1933 dio sus primeros pasos en esta península de Santander». Es decir, «impulsarla a las máximas cotas y al mismo tiempo profundizar en su arraigo en la sociedad de Cantabria», ha enfatizado.

«Queremos a la UIMP. Esta universidad nació aquí mismo hace 90 años y aquí están sus raíces más hondas», ha afirmado Buruaga, que también espera que el Ejecutivo central «redoble» su apuesta por la UIMP, pues «cumple una función nacional muy especial».