FADSP alerta de que el aumento de la financiación en Atención Especializada se debe a un aumento del gasto farmacéutico
La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) ha notificado un incremento del 34 por ciento en el gasto por habitante en Atención Especializada (AE) en el periodo comprendido entre 2010 y 2020 –que oscila desde el 39% en Madrid al 18% en La Rioja–, pero lamenta que este aumento se ha destinado «básicamente» al gasto farmacéutico, y advierte de la «privatización» de este nivel asistencial.
El porcentaje de gasto en AE sobre el gasto sanitario total también aumentó un 11 por ciento, y este aumento estuvo entre el 17 por ciento en Aragón y el 2 por ciento en Murcia. En 2020, el porcentaje varió entre el 69,66 por ciento de Madrid y el 57,02 por ciento de Extremadura (promedio 63,64%). «Si se descuenta el gasto farmacéutico, el porcentaje de gasto dedicado a AE se reduce al 53,2 por ciento», ha detallado en rueda de prensa el presidente de la FADSP, Marciano Sánchez Bayle.
Así, en el año 2021, el gasto en euros por habitante en AE tuvo su máximo en el País Vasco (1.461,44 euros) y el mínimo en Andalucía (1.027,16 euros). Además, el gasto en conciertos aumentó globalmente entre 2020 y 2021 (8%), pero presentó una mayor dispersión, entre el -13 por ciento de La Rioja y el 35 por ciento en Madrid. El porcentaje de gasto sanitario total dedicado a conciertos en 2021 fue del 6,6 por ciento en España, y oscilaba entre el 23,9 por ciento de Cataluña y el 2,8 por ciento de Castilla y León.
Las altas financiadas públicamente en 2021 aumentaron respecto a 2020 en un 6 por ciento globalmente (entre el 8% de Valencia y el 3% de Madrid y Castilla-La Mancha). Mientras tanto, las de financiación privada tuvieron un incremento del 9 por ciento (desde el 24% de Asturias hasta el -22% de Extremadura).
«De todo ello se deduce que aumentó la financiación de la AE con una mayor financiación del sector privado, es decir, un aumento de la privatización, así como del gasto farmacéutico hospitalario», ha insistido Sánchez Bayle.
RECURSOS
El número de camas instaladas por 1.000 habitantes es bajo en el país y ha disminuido entre 2010 y 2021, de 3,43 en 2010 a 3,29 en 2021 (0,14 menos/1.000). El número de camas en funcionamiento es aún menor, y ello contrasta con los promedios de la Unión Europea (5,21) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (4,4), por lo que el déficit de camas hospitalarias es «preocupante». Las camas de media y larga estancia son pocas y disminuyeron en este periodo (de 0,32 a 0,24/1.000, frente al 1,5/1.000 de promedio de la UE).
Asimismo, la dotación tecnológica entre 2020 y 2021 aumentó, tanto en los centros públicos como en los privados, aunque más en los primeros: 4 por ciento frente a 1 por ciento por millón de habitantes. El personal de AE también aumentó un 20,29 por ciento entre 2010 y 2021 y en todas las CCAA.
Además, el personal de los centros públicos por cama es significativamente mayor que en los privados: personal total 4,58 versus 2,46 (1,86 veces más); médico 0,73 versus 0,28 (2,60 veces más); enfermería 1,37 versus 0,58 (2,36 veces más).
ACTIVIDAD Y FUNCIONAMIENTO
Según el informe, se produjo un aumento en la tasa de consultas por 1.000 habitantes tanto respecto a 2020, probablemente por el efecto negativo que tuvo la pandemia sobre estas, como comparando con 2019 (un 0,49%). Las comunidades con mayores tasas de consultas externas en 2021 van desde 2.870.94 de Madrid hasta 1.790.95 de Navarra.
Al hilo, se ha producido un aumento de las intervenciones quirúrgicas por 1.000 habitantes que han pasado de 100,93 en 2010 a 105,75 en 2021. En este año, van desde 136,15 en Cataluña hasta 66,47 en Castilla-La Mancha.
Las intervenciones por quirófano y año cayeron en 2020 por la pandemia y aumentaron en 2021. En este año, el promedio del país fue de 1.069,18 (desde 1.323,87 de La Rioja hasta 845,61 de Navarra).
NÚMERO DE PARTOS
El número de partos disminuyó en todas las CCAA, y el porcentaje de cesáreas sobre el mismo globalmente ha disminuido entre 2010 y 2021, pasando del 25,5 por ciento al 24,59 por ciento (aproximadamente un punto menos).
Se observa la clara diferencia entre centros públicos y privados en cuanto al menor porcentaje de cesáreas en los primeros que se ha reducido en el periodo analizado, aunque continúa siendo muy elevada (15,93 puntos en 2010 versus 12,27 puntos en 2021). Sánchez Bayle ha recordado que la OMS recomienda que se mantenga por debajo del 15 por ciento, lo que solo se consigue en el País Vasco.
PRUEBAS DIAGNÓSTICAS
La prueba diagnóstica que más se utilizó en 2021 es el TAC, con una tasa de 127,3/1.000 habitantes; en segundo lugar, la resonancia magnética (87,6/1000) y luego las mamografías (53,3/1000).
El informe apunta a «una gran variabilidad» entre CCAA en 2021: el TAC oscila entre 142,7 en Cataluña y 96,16 en Murcia; el SPECT entre 6,96 en Navarra y 0,47 en Murcia; la resonancia magnética entre el 136 en Madrid y el 39,2 en Extremadura; el PET entre en 11,4 en Cataluña y 2,74 en Castilla y León; las mamografías entre el 105 en Asturias y el 22,9 en Murcia; las angiografías entre el 6,63 en Cantabria y 0 en La Rioja; y la gammagrafía entre el 14 en Castilla y León y el 3,17 en el País Vasco.
LISTAS DE ESPERA
La lista de espera quirúrgica (LEQ), comparada con diciembre de 2012, supone una ligera mejora en tiempo medio de demora (0,1 día menos, un 0,10%) y mejora pequeña en el porcentaje que espera más de 6 meses (de 16,69 a 14,3%, un 14,3% menos) y una disminución en la tasa de personas en LEQ /1.000 (de 14,5 a 6,69%).
En 2021 la demora media oscila entre 125 días de Cataluña y 61 de Madrid (aunque debe tenerse en cuenta que en esta comunidad autónoma se contabiliza la demora a partir de la consulta del anestesista).
El porcentaje con más de 6 meses de demora va desde 26,3 por ciento de la Rioja a 3,3 por ciento de Madrid (de nuevo hay que considerar el aspecto anteriormente señalado).
«La lista de espera de consulta externa (LEC) también debe verse con matices ya que solo recoge la demora de la primera consulta y no la de las sucesivas, que habitualmente suelen ser mucho mayores», advierte el informe, que puntualiza que, en todo caso, se produce un aumento de la demora media, que pasa en el mismo periodo, de 61 a 83,29 días (aumento del 36,54%), aumenta el número de pacientes con más de 60 días de demora de 35,13 a 41,21% (17,30% más) y la tasa de pacientes en espera /1.000 (de 44,67 a 66,03, un 21,36% de aumento). En 2021, la demora media va desde 91,1 días en Canarias a 5,6 en Baleares.
LAS CIFRAS DEL GASTO FARMACÉUTICO
Así las cosas, el gasto farmacéutico hospitalario «continúa en un aumento imparable y muy superior al incremento del gasto sanitario hospitalario en su conjunto», lamentan desde la FADSP.
Entre 2014 y 2019, el aumento fue del 44,3 por ciento y, entre 2014 y 2022, del 70,86 por ciento. En 2022, el aumento promedio respecto a 2021 fue del 4,8 por ciento, oscilando entre el -11,1 por ciento de Castilla la Mancha hasta el 9,1 por ciento de Valencia.
El gasto farmacéutico hospitalario por habitante y año y en las distintas CCAA, entre 2021 y 2022 tuvo un aumento de 7,63 euros (un 4,36% más), y en este último año osciló entre 283,84 en Valencia y 157,37 en el País Vasco.
«La valoración general es que la AE es un sistema muy privatizado, donde los incrementos en la financiación han ido básicamente destinados a aumentar el gasto farmacéutico, donde hay unas listas de espera que son intolerables, y donde hay un número de camas por 1.000 habitantes que, además, disminuye de año en año», ha concluido el presidente de la FADSP.