Agosto fue muy cálido y muy húmedo en Cantabria
Agosto fue un mes muy cálido y muy húmedo en Cantabria, según el avanca climatológico facilitado este miércoles por la Delegación Territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
Agostó resultó muy cálido, con 19,2 grados de temperatura media en la región, 0,9 grados por encima del valor medio, lo que le sitúa como el séptimo agosto más caluroso de la serie 1961-2023.
También fue muy húmedo en el cómputo regional con 81,3 litros por metro cuadrado, lo que supone un 52% más de lo esperado en un mes de agosto y lo sitúa como el decimocuarto agosto más húmedo de la serie ordenada desde 1961.
Sin embargo, la distribución espacial de la precipitación no fue uniforme, y se reconoce un área donde fue especialmente abundante, la mitad oriental y en las cabeceras del Pas y el Miera, y otra donde fue muy escasa, pues tanto en Liébana como en las comarcas del Ebro se recogió menos de la cuarta parte de lo normal. Incluso en Castrillo de Valdelomar solo se registró un día con precipitación inapreciable en todo el mes.
El mes de agosto quedó caracterizado por el episodio de calor extremo del día 23 y el drástico cambio de tiempo posterior, que además de un descenso acusado de las temperaturas acumuló abundantes lluvias en la última semana en el centro y mitad oriental de la región.
El año hidrológico en curso, desde octubre de 2022 hasta el 1 de septiembre de 2023, mantiene el carácter muy seco, con un déficit del 19%. Se llevan recogidos 953 litros por metro cuadrado cuando por estas fechas se han alcanzado ya los 1.169, en promedio.
La precipitación cayó agrupada en dos episodios principales, al principio y al final del mes. El primero estuvo asociado al paso de la borrasca Patricia y dejó cantidades significativas en San Vicente de la Barquera, 33,7 litros por metro cuadrado; San Roque de Riomiera-El Caracol, 28,8; y San Felices de Buelna, 27,2.
El segundo se extendió entre los días 25 y 30 y dejó más de 100 litros por metro cuadrado en Tresviso, Villacarriedo-Santibáñez o San Vicente-Faro; y más de 170 en San Roque de Riomiera-El Caracol; Soba Brenarromán-Naturea, 171, y Vega de Pas Aguasal-Naturea, 200.
Las temperaturas han estado por encima de los valores normales entre el día 7 y el 25, y fueron especialmente altas las temperaturas mínimas.
Lo más destacado, sin embargo, fue el episodio de temperaturas extremas del día 23 y, en menor medida, el del día 9.
El día 23 se alcanzaron 43,3 grados en Ramales de la Victoria, y 43 en Tama, segundo y tercer registro más alto de temperatura en Cantabria desde el inicio de las observaciones –el mayor es el de 43,5 de Terán de Cabuérniga de julio de 2022–; y 41,4 grados en el aeropuerto de Santander-Parayas y en San Felices de Buelna, entre otros valores extraordinarios.
El episodio del día 9 alcanzó una temperatura máxima en la región de 40,2 grados.
El episodio de calor excepcional del día 23 terminó bruscamente, y las temperaturas máximas descendieron más de 20 grados en dos días en Terán, Villacarriedo o Ramales.
En Santander-Parayas se registraron 206 horas de sol, un 10% más de lo esperado el mes de agosto.
El viento, en el mismo observatorio, recorrió 8.991 kilómetros, un 23% más de lo normal en este mes de agosto. Además, se apreció un aumento significativo de los vientos procedentes del cuadrante suroeste, frente a una disminución apreciables de los que proceden del nordeste.
Se registraron 211 descargas procedentes de tormenta los días 22, y 23. La mayor actividad se concentró el día 23 con 107 descargas registradas.
VALORES EXTREMOS
La temperatura máxima más alta fueron los 43,3 grados el día 23 en Ramales de la Victoria; y la mínima más baja, 3,4°C el día 7 en Nestares.
La máxima precipitación recogida en 24 horas fueron 63 litros por metro cuadrado el día 28 en San Roque de Riomiera-Caracol; y la racha máxima de viento alcanzó los 86 kilómetros por hora el día 18 en Fuente Dé-Mirador del Cable.