El Ibex 35 cae casi un 0,3% en la apertura con China en el foco y a la espera del IPC de la eurozona

El Ibex 35 ha iniciado la sesión de este viernes con un descenso de casi el 0,3%, lo que ha llevado al selectivo hasta los 9.251 puntos, después de que ayer perdiera la cota de los 9.300 enteros y marcara su nivel más bajo desde el pasado 10 de julio.

El selectivo iniciaba la jornada mirando hacia China y Japón, con las Bolsas asiáticas en negativo después de conocerse que la inmobiliaria china Evergrande, acuciada por problemas desde hace años, se ha declarado en bancarrota en Estados Unidos. Ello, unido a los problemas de otra gran promotora china, Country Garden, está sembrando dudas sobre la economía del país ante la debibilidad de su sector inmobiliario.

Además, hoy se ha conocido el IPC de Japón del mes de julio, que ha reflejado una moderación de su tasa interanual hasta el 3,1%, pero un repunte de la inflación subyacente de una décima, hasta el 4,3%, máximos desde 1981.

Los inversores estarán hoy muy pendientes de la publicación del IPC de la eurozona, en el marco de la lucha del Banco Central Europeo (BCE) para controlar la inflación mediante los tipos de interés.

A la espera de conocer el dato, las principales Bolsas europeas también han despertado hoy con pérdidas. París y Milán se dejaban un 0,4% en la apertura, en tanto que Francfort y Londres cedían un 0,5%.

En los primeros compases de la sesión de este viernes, las mayores subidas dentro del Ibex 35 se las anotaban Telefónica (+0,82%), Iberdrola (+0,35%), Cellnex (+0,2%) y Naturgy (+0,16%).

En el otro extremo, las caídas más pronunciadas se las llevaban ArcelorMittal (-0,84%), Sacyr (-0,66%), IAG (-0,63%), Amadeus (-0,56%), y Colonial, cuyas acciones perdían un 0,43%.

En la apertura del mercado bursátil, el precio del barril de petróleo de calidad Brent, referencia para el Viejo Continente, subía ligeramente hasta los 84,19 dólares, mientras que el Texas se situaba en 80,59 dólares, un 0,2% más.

En el mercado de las divisas, la cotización del euro frente al dólar se mantenía en el entorno de los 1,0869 billetes verdes , en tanto que en el mercado de deuda el interés exigido al bono español a 10 años se relajaba hasta el 3,662%.