Periodistas de Cantabria se ponen en la piel de las personas invidentes con un Desayuno a ciegas de la ONCE

Varios profesionales de los principales medios de comunicación de Cantabria se han puesto hoy en la piel de las personas con discapacidad visual mediante una actividad organizada por la celebración de la Semana del Grupo Social ONCE, en la que han podido vivir un Desayuno a ciegas para entender las dificultades que tienen las personas invidentes en una situación cotidiana.

Provistos de un antifaz, los participantes han sido ayudados y guiados hasta sus mesas por técnicos de Rehabilitación de la ONCE, donde se les han explicado algunas técnicas y donde han vivido en primera persona las mismas sensaciones que las personas ciegas a la hora de realizar actividades tan sencillas para el resto como servirse un zumo en un vaso o comerse un sobao o una galleta después de mojarlo en el café.

De esta manera, en esta actividad en el Hotel Escuela Las Carolinas de Santander, han podido experimentar las sensaciones de una persona con discapacidad visual, manipulando los diferentes alimentos colocados en la mesa y haciéndose unas ideas del espacio y los objetos de su alrededor muy diferente a la realidad que han podido ver al quitarse el antifaz.

Algunos de ellos se han sorprendido al comprobar la distancia real que había entre los comensales, distinta a la que imaginaban, o al ver el tamaño de la cesta donde se encontraban los diferentes productos del desayuno, también alejado de la idea que se había hecho en sus cabezas.

Además, prácticamente todos han tratado de no derramar el zumo o el café en la mesa, moviendo sus manos con mucha prudencia y siguiendo las directrices de los técnicos de la ONCE.

Con todo, los profesionales de la comunicación han aprendido también las soluciones que permiten que las personas ciegas puedan valerse por si mismas, como puede ser, en esta situación específica, la implementación del lenguaje Braille en los menús.

Y es que según ha destacado Hugo Lebaniegos, antiguo locutor de radio en Cantabria y afiliado de la ONCE desde hace más de 30 años por una discapacidad visual, «una persona ciegas no quiere que el resto de personas sean su servidumbre o que trabaje para ella», sino que «le faciliten las herramientas para que pueda ser autónoma totalmente».

Durante la actividad ha estado presente también el presidente de la Asociación de Empresarios y Hosteleros de Cantabria, Javier Bedia, quien ha puesto en valor la importancia de llevar a cabo iniciativas de este tipo, que «llegan al corazón» y «hacen ver a la gente» que no todo el mundo tiene «las mismas posibilidades» para llevar a cabo tareas cotidianas.

Por ello, ha abogado por valorar este tipo de experiencias y realizar «pequeños gestos» que ayuden a la gente ciega y les facilite «muchísimo» su vida. En su opinión, es necesario «un poco de educación y formación», porque «no es tan complicado ayudar a las personas siempre y cuando haya predisposición».

«Con muy pocos gestos por parte de la sociedad y de los profesionales de la hostelería se les puede ayudar y facilitarles tremendamente el hecho de compartir un desayuno, una comida, una cena o una mesa», ha incidido Bedia.

Tras este Desayuno a ciegas para concienciar a la sociedad sobre las dificultades que viven las personas invidentes, se ha presentado el cupón que la ONCE dedica a la Hostelería, en cuyo acto, además de JavierBedia, han participado el presidente del Consejo Territorial de la ONCE en Cantabria, Sergio Olavarría, y el director técnico adjunto de la Delegación Territorial de la ONCE en la región, Francisco Monzón.

Así, cinco millones de cupones difundirán por toda España el papel y la labor social que restaurantes, bares y cafeterías realizan como punto de encuentro de millones de personas.