Astaxantina: el antioxidante más potente e imprescindible para los amantes del deporte al aire libre
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Se trata de un potente antioxidante que favorece la recuperación tras la práctica de ejercicio físico. Ha demostrado ser eficaz en el cuidado de la visión, al limitar la fatiga ocular, y de la piel al prevenir el envejecimiento cutáneo, órganos que están constantemente expuestos a la luz solar. La astaxantina de Cuure es extraída de la microalga Haematococcus Pluvialis gracias al proceso patentado AstaPure®
Cuure, empresa especializada en suplementos alimenticios ultrapersonalizados, da a conocer los beneficios de la astaxantina, un potente antioxidante, 100% natural, que actúa como agente protector del organismo y cuyas propiedades son esenciales para los deportistas, ya que ayuda a reducir el estrés oxidativo que se produce después de realizar ejercicio físico. Se trata, además, de un pigmento que favorece la limitación del estrés oxidativo producido por la radiación ultravioleta, la contaminación o el tabaco, entre otros, responsables del envejecimiento prematuro de las células.
La astaxantina es una sustancia producida por una microalga llamada Haematococcus Pluvialis que actúa como un potente escudo para el cuerpo. Aunque poco utilizada en el continente europeo, este pigmento rojo es muy popular entre los deportistas de élite en Asia y América, ya que ayuda a recuperarse más rápido después del ejercicio y aumenta la quema de grasas. Además, tiene la capacidad de atravesar todas las membranas celulares y actuar en todos los tejidos del sistema orgánico.
El suplemento natural de astaxantina de Cuure está compuesto por oleorresina rica en astaxantina y de excipientes como el glicerol o el aceite de oliva, y no contiene gluten, soja, lactosa ni azúcar. Con una fórmula 100% vegana, se extrae de la microalga Haematococcus Pluvialis mediante el proceso patentado AstaPure®, un bioproceso responsable con el medio ambiente ya que el alga es cultivada mediante energía solar y el agua de un mar situado a 1km por debajo de la superficie.
«Hemos desarrollado nuestra astaxantina de la forma más responsable posible. A diferencia de la mayor parte de la producción de haematococcus pluvialis, nuestras algas se cultivan en un desierto donde sólo utilizan la luz solar y, por lo tanto, ningún aporte energético. La fábrica funciona totalmente con paneles solares y el agua utilizada para cultivar las algas se recoge y se utiliza para regar un oasis cercano. Dado que la astaxantina es una molécula con propiedades idénticas independientemente de su origen geográfico, hemos optado por un cultivo responsable», comentan desde el departamento de I+D de Cuure.
Con la astaxantina de Cuure, ahora existe una alternativa para cuidar del cuerpo durante la práctica de ejercicio físico al aire libre y limitar, así, las posibles consecuencias negativas producidas por una sobreexposición a la radiación UV.
Fuente Comunicae