UPA declara este miércoles ante el Tribunal Supremo para defender la Ley de la Cadena Alimentaria
El proceso judicial comenzó el pasado noviembre con una demanda de las industrias lácteas
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) declarará este miércoles en el Tribunal Supremo en el caso iniciado por la Federación Nacional de Industrias Lácteas (Fenil), que interpuso en noviembre de 2022 una demanda para tumbar la Ley de la Cadena Alimentaria, según ha explicado UPA en un comunicado.
La intención de las industrias lácteas es eliminar «la prohibición de la compra a pérdidas en cada eslabón de la cadena alimentaria», una medida denominada en la Ley como «destrucción de valor de los productos». Fenil considera que pagar un precio por encima de los costes de producción es «contrario a derecho».
Por su parte, UPA defiende que es necesario «salvaguardar este punto clave de la Ley de la Cadena», pues evita que los productores perciban un precio inferior a sus costes.
Con la intención de demostrar su posición, UPA acudirá este miércoles al TS para presentar documentación pericial, al igual que Fenil. Desde la asociación de ganaderos han explicado a Europa Press que su informe es «bastante extenso» y refleja detalladamente la situación que se vive en el sector y por qué es necesario mantener la prohibición de la compra a pérdidas.
UPA considera que la demanda de Fenil demuestra que esta medida de la Ley de la Cadena es una «de las que más molesta a los eslabones que han controlado la cadena alimentaria en las últimas décadas». Además, ha calificado de «deleznable» la iniciativa de Fenil.
Desde la asociación han explicado a Europa Press su intención de «defender los intereses de los ganaderos» en esta causa y han denunciado la situación que vive el sector lácteo, pues aunque la leche es un producto básico en la cesta de la compra en España, este es deficitario.
Por ello, «los ganaderos llevan décadas sufriendo una gravísima crisis de rentabilidad». De hecho, según los datos ofrecidos por UPA, en los últimos cinco años han cerrado más de 3.000 granjas ganaderas.