Scope mantiene el rating de España en A- con perspectiva estable
Prevé una tasa de crecimiento del 1,6% en 2023 y del 2,1% en 2024
La agencia de calificación crediticia Scope Ratings ha decidió mantener el rating de España en A- con perspectiva estable , debido a que el país cuenta con una economía «amplia y diversificada», respaldada «por una reorientación hacia sectores de alto valor añadido».
Además, la agencia justifica que entre las razones que han apoyado esta decisión, destaca el perfil de deuda pública favorable con vencimientos a largo plazo. También ponen en valor el marco institucional «sólido», reforzado por la pertenencia del país a la eurozona, que mejora la resistencia a las crisis externas.
Scope prevé una recuperación gradual del crecimiento económico de España en los próximos meses, proyectando una tasa de crecimiento del 1,6% en 2023 que se espera se acelere hasta el 2,1% en 2024. Con todo, la agencia de calificación espera que la producción económica supere su nivel prepandémico en el segundo semestre de 2023.
De su lado, Scope prevé un descenso moderado del déficit fiscal hasta el 4,4% del PIB en 2023, con un crecimiento continuado que repercutirá positivamente en los ingresos fiscales. No obstante, la agencia ha advertido de que el aumento de los pagos de pensiones, los déficits primarios sostenidos y los crecientes costes del servicio de la deuda seguirán ejerciendo presión sobre las finanzas públicas, lo que se traducirá en un saneamiento más lento y una mayor moderación del presupuesto general hasta aproximadamente el 3,7% del PIB en 2024. Se espera que el ratio de deuda sobre el PIB siga disminuyendo hasta el 111,4% en 2023 y se estabilice en torno al 109% hasta 2027.
RETOS SOBRE DEUDA, DESEMPLEO Y ENVEJECIMIENTO ACELERADO
Según Scope, el rating de España se ve limitado por retos relacionados con los altos niveles de deuda pública; el elevado desempleo estructural y las presiones presupuestarias a largo plazo causadas por una dinámica de envejecimiento acelerado.
La perspectiva estable del rating refleja que los riesgos para las calificaciones de España en los próximos 12 a 18 meses están equilibrados. El rating A- con perspectiva estable podría elevarse si se produjera una mejora notable, individual o colectivamente, en las perspectivas de crecimiento, apoyadas, por ejemplo, por el progreso de las reformas y las finanzas públicas, situando la deuda pública en una firme trayectoria descendente.
Por el contrario, la calificación/perspectiva podría rebajarse si el bajo crecimiento del PIB y el prolongado deterioro de las finanzas públicas debilitaran la sostenibilidad de la deuda; y se retrasaran las reformas, lo que afectaría negativamente a las perspectivas económicas y fiscales.