Revilla avisa a quienes insultan al PRC que están «haciendo oposiciones contra posibles conversaciones postelectorales»
Responde a las acusaciones de Gamarra y Pardo de Vera: «Yo no he cogido nada de nadie en mi vida, ni nadie de este partido»
El presidente de Cantabria, líder del PRC y candidato autonómico, Miguel Ángel Revilla, ha avisado a quienes insultan al su partido que están «haciendo oposiciones en contra de posibles conversaciones postelectorales».
«Unos y otros están haciendo oposiciones para que luego no nos reunamos con ellos», ha dicho Revilla durante su intervención en un acto público celebrado este sábado en Potes con motivo de la presentación de sus candidatos a las alcaldías de Liébana.
Allí, ha respondido a las críticas dirigidas en los últimos días contra su formación por líderes nacionales del resto de los partidos, como la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, o la exsecretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Vera, quien dimitió hace un par de meses por el conocido problema de los trenes de Cercanías de Cantabria y Asturias.
Revilla ha lamentado el tono de «los que sólo aparecen por aquí los años que hay elecciones» y ha asegurado que si él llamara a alguien «corrupto o mamarracho» e incurriera en todo tipo de insultos contra un adversario político «no valdría para llamar al día siguiente» y plantear una posible reunión.
«Yo para eso no valgo», ha recalcado Revilla, quien ha reivindicado al PRC como «un partido serio, honrado y que ha dejado la vida para poner a Cantabria en el mapa», desde que comenzó su trayectoria política hace más de 40 años, cuando la región ni siquiera se llamaba así.
Revilla ha salido al paso de las declaraciones de la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, y de la exsecretaria de Estado de Transportes y expresidenta de ADIF, Isabel Pardo de Vera, que le han acusado de haber pretendido «tapar» la corrupción, en alusión a la trama de carreteras .
«A mí que me registren, yo no he cogido nada de nadie en mi vida, ni nadie de este partido», ha respondido Revilla, que ha insistido en avisar a los suyos de que la campaña electoral va a ser «muy dura», con el PRC como «el único enemigo» del resto de las formaciones.
Por ello, ha pedido a candidatos, militantes y simpatizantes que «saquen pecho», porque en esta legislatura se han conseguido para Cantabria «cosas impensables», como la puesta en marcha de las obras de mejora del Desfiladero de La Hermida, el avance de las obras del AVE a Madrid, las mejora de la red de cercanías y el pago de las deudas acumuladas por la reconstrucción de Valdecilla, por importe de 140 millones, y el impago del IVA de 2017.
«Hemos conseguido todo lo que habíamos puesto en el papeluco , ha sido una legislatura en la que hemos sacado lo impensable», ha subrayado.
Además, no sólo ha puesto en valor los avances en las obras dependientes del Estado, que ha atribuido a la presencia del diputado regionalista José María Mazón en el Congreso de los Diputados, sino también la labor del Gobierno de Cantabria y el impulso dado, a pesar de la pandemia y la guerra en Ucrania, a activos económicos como el puerto de Santander y el aeropuerto o la promoción realizada de la comunidad autónoma, en general, y de Liébana en particular, ante el inicio mañana de un nuevo Año Jubilar Lebaniego.
«Tenemos motivos para estar ilusionados, yo lo estoy, porque a mí me gustan los retos y me gusta que me den caña, siempre que no insulten, ya que tenemos razones para replicarles», ha subrayado, al tiempo que ha declarado que a sus 80 años está «como una moto» para afrontar esta nueva campaña y «muy contento de ver los equipos que tiene el PRC por todos los lugares de la región, con personas muy preparadas y mucha gente joven».
En concreto, ha asegurado tener «muchas esperanzas» en la candidatura de Santander que encabeza Felipe Piña, «rodeado nada menos que de dos olímpicos», en alusión a la incorporación a la lista municipal aprobada este sábado de los deportistas Laura Nicholls y Gonzalo Colsa.
Por todo ello, Revilla ha expresado su confianza en ganar las elecciones y «dar una sorpresa» y ha pedido no fiarse de las encuestas, porque –ha dicho– «nunca» dan a los regionalistas lo que han sacado.