Dita Charanzová, vicepresidenta del Parlamento Europeo, pide poner fin al acuerdo de diálogo con Cuba
Prisoners Defenders denuncia que el país cuenta con «el hacinamiento de presos per cápita más grande del mundo»
Alerta de que la migración en el último año supera «las anteriores olas migratorias»
La vicepresidenta del Parlamento Europeo Dita Charanzová ha reivindicado la importancia de «poner fin» al Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación entre Cuba y la Unión Europea firmado en 2016 y ha subrayado que el trabajo de la Eurocámara no cesará «hasta que se logre la libertad» para el pueblo cubano.
«Está claro que el Parlamento Europeo ha estado siempre al lado de la sociedad civil cubana, al lado de todos los que luchan por los Derechos Humanos en Cuba. Hemos aprobado varias resoluciones sobre la violación de estos derechos y hace ya más de seis años que aprobamos el famoso acuerdo», ha manifestado.
En este sentido, ha puntualizado que fue la propia Eurocámara la que «exigió el diálogo sobre los Derechos Humanos» y ha hecho hincapié en que existían condiciones al respecto: «tenemos que ver que esta situación mejora, y no al contrario, como vemos ahora».
«Yo, personalmente, pienso que necesitamos suspender este acuerdo porque en esta situación, y viendo la connivencia con Vladimir Putin, podemos ver cómo se divide el mundo, dónde están los países democráticos», ha afirmado antes de alertar de que «en este contexto no podemos sostener este acuerdo».
Charanzová ha recordado las protestas registradas en el país el pasado 11 de julio de 2021 y ha recalcado que aquel día «el pueblo cubano dijo basta y salió a la calle de forma pacífica, frustrado, desesperado y dispuesto a perder la libertad e incluso la vida». «A pesar de que las manifestaciones fueron pacíficas, la dictadura respondió con represión, crueldad, deteniendo arbitrariamente a cientos de personas sin siquiera informar a sus familias sobre su paradero», ha añadido.
Así se ha expresado durante un evento organizado por la ONG Prisoners Defenders en la sede del Consejo General de la Abogacía Española en Madrid, en el que han dado a conocer la denuncia presentada ante Naciones Unidas sobre la situación que atraviesan los presos políticos en el país caribeño.
Según Charanzová, el documento «saca a la luz las violaciones de Derechos Humanos que la dictadura comunista cubana perpetúa contra sus propios ciudadanos». «Desgraciadamente, para muchos de nosotros, que seguimos lo que pasa en Cuba, esto no es sorprendente», ha puntualizado.
«Aquí se recoge la interferencia del Partido Comunista de Cuba en el acceso y desarrollo de la Justicia, y saca a la luz la encarcelación y la tortura de presos políticos e incluso niños. No podemos permitir ser espectadores de esta tragedia, no hacer nada, tenemos que actuar. (…) Como recoge la denuncia, se han violado al menos trece Derechos Humanos», ha sostenido.
Sobre este asunto, ha aprovechado para recalcar que desde el Parlamento Europeo se ha «condenado enérgicamente las muchas violaciones de derechos en Cuba a manos del régimen y se ha expresado la solidaridad con todos los artistas, periodistas, defensores de Derechos Humanos, presos políticos y de conciencia reprimidos y perseguidos por el régimen».
«Desde Europa exigimos la liberación de los presos políticos y pedimos libertad de prensa, expresión y asociación. Dejamos un mensaje claro, no vamos a parar hasta que cuba sea un país democrático que respete los Derechos Humanos», ha declarado.
LA DENUNCIA DE PRISONERS DEFENDERS
La denuncia, presentada bajo el título 1.000 familias vs. Gobierno cubano , cubre los dictámenes individuales completos de más de 300 víctimas que demuestran, «sin lugar a la duda jurídica, patrones estructurales violatorios del debido proceso y la defensa efectiva en el sistema procesal cubano», según ha explicado el presidente de la organización, Javier Larrondo.
El documento señala que «no existe incertidumbre sobre la arbitrariedad e ilegalidad por la que miles de familias en Cuba sufren solo por haber expresado sus sentimientos, anhelos y necesidades» y advierte que muchas de estas familias afectadas tienen más de uno de sus miembros en prisión, «siendo torturados o condenados a penas que se cuentan por decenas de años».
Es por ello que los casos analizados, tal y como han especificado, permiten determinar que «los 1.077 prisioneros políticos que Cuba mantiene condenados en la actualidad han sufrido las mismas violaciones procesales y todos, sin excepción, deberían ser puestos en libertad con inmediatez». Además, han solicitado que sean indemnizados por las autoridades cubanas debido a las «las atrocidades sufridas en prisión y a las consecuencias para sus familiares, que han sido amenazados, perseguidos, hostigados, interrogados, citados, multados e incluso detenidos».
El propio Larrondo, que ha abordado también la cuestión del acuerdo entre la UE y Cuba, ha subrayado que antes de las protestas de verano de 2021, Cuba «tenía cientos de presos políticos, generalmente periodistas independientes, intelectuales disidentes ya activistas de Derechos Humanos». Además, unas 11.000 personas en Cuba estaban condenadas de manera «predelictiva», ha incidido, dado que «se observaban conductas contrarias a la moral socialista, por lo que son considerados proclives a cometer delitos en el futuro».
De esta manera, ha reparado en que «cientos de miles de jóvenes de todo el país han pasado de uno a cuatro años en prisión por esta predicción sin haber cometido un delito» y ha indicado que «en las cárceles de Cuba hay más de 90.000 presos, mientras que otros 40.000 han sido condenados a medidas de limitación de libertad domiciliaria». «Se trata del hacinamiento de presos per cápita más grande del mundo», ha apostillado.
En relación con las protestas del 11J, ha declarado que «en más de 50 ciudades de Cuba miles de ciudadanos alzaron su voz con lemas pacíficos como Patria y vida , expresiones pacíficas que no incluyen la violencia», pero ha insistido en que fue el propio presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, pidió a la ciudadanía salir a la calle para «enfrentarse a los que tildó de contrarrevolucionarios».
«Los verdaderos revolucionarios eran los que estaban en las calles pidiendo libertad. El pueblo no salió a luchar contra sus iguales, fue una coreografía orquestada por las autoridades», ha denunciado al tiempo que ha expuesto que ya son 410 los menores encarcelados en Cuba, «de los cuales 260 tienen entre 16 y 17 años, pero 150 tienen menos de 15 años».
CUESTIÓN MIGRATORIA
Larrondo ha remarcado así que el pueblo cubano, «personas llanas y no activistas, (…), está enviando a sus hijos al exterior por el miedo de que cualquiera acabe preso mientras no hay opciones para ganarse la vida, por un lado, en un no mercado donde solo el Gobierno puede otorgar el permiso para trabajar a quién y cómo le parezca oportuno y donde no se puede importar ni exportar, ni prosperar con un mínimo de libertades económicas».
«Están enviando a sus hijos fuera porque consideran que en este ambiente, si se te ocurre quejarte, vas a prisión. Se han ido más de 300.000 personas en un año, de un país de 11 millones de personas. Es impresionante. Ha habido más inmigración en este último año que todas las anteriores olas migratorias», ha alertado.
Además, ha lamentado que este sea el modelo de Estado que «se quiere imponer en el mundo». «Estamos en una situación en la que este tipo de modelo de Estado, Vladimir Putin, los Castro, Irán… Es el modelo que quieren imponer en Ucrania, en Europa y, a ser posible, en el resto del mundo. El presidente de Cuba es un claro aliado de Putin en su estrategia imperialista mundial (…) y le ha felicitado por la anexión de territorios ucranianos», ha aclarado, no sin antes insistir en la importancia de cumplir un acuerdo de diálogo con la UE que «se viola cada día».