Su presidente, Antonio Mayoralas, reconoce que «esperará al resultado de las elecciones para replanteárselo»

El Grupo Celtus tiene intención de, junto con un grupo de inversores, «reactivar y reconducir» el proyecto de la Ciudad del Cine y las Artes de Cantabria y plantea una inversión de más de 500 millones.

Así lo ha anunciado este sábado, en un comunicado, Antonio Mayoralas, presidente de la Fundación Lumière y del Grupo Celtus, «idéologo y autor» del proyecto de la Ciudad del Cine y las Artes de Cantabria, anunciado en la primera década de los 2000 y que entonces no salió adelante, acabando en litigios y llegando a los tribunales.

Mayoralas ha anunciado la intención del Grupo Celtus de «reactivar» este proyecto tras la condena impuesta a José Chauffleur Buenante que –dice– fue «su principal estafador–, en alusión a José Chauffleur Buenante, «tras robar y utilizar su proyecto».

En mayo del pasado año, el Tribunal Supremo confirmó la condena de tres años de prisión y multa de 1.920 euros impuesta a Chauffleur Buenante, por quedarse con el dinero que varios empresarios invirtieron en dicho proyecto. También la Sala de lo Penal del TS fijó el pago de una indemnización de 329.450 euros más los intereses a los perjudicados.

MAYORALAS «ESPERARÁ AL RESULTADO DE LAS ELECCIONES»

Mayoralas ha explicado que ha empezado a «gestionar un nuevo comienzo para habilitar las fórmulas necesarias y poder llevar a cabo dicho proyecto» y ha asegurado que en la actualidad cuenta «con los apoyos» de compañías como Equity & Capital Ventures Limited y JMM Invesmetllc.

Sin embargo, ha afirmado que «esperará al resultado de las elecciones para replantéaselo».

Mayoralas ha relatado que ya en 2002 planteó el macroproyecto de La Ciudad del Cine y las Artes para desarrollarlo y construirlo en los terrenos donde se encuentran las minas de Solvay en Torrelavega, con el fin de recuperar y readaptar estos terrenos y ocupar otros en la localidad Miengo.

Ha indicado que el proyecto contó con un grupo de empresarios quecreyeron y apostaron por el mismo, constituyendo para su ejecución dos mercantiles, Celtus Gestora de Parques Temáticos S.A. con 900.000 euros y Celtus Inversión y Desarrollo S. A. con 490.000 de capitales sociales.

El proyecto se inició, ha indicado, firmando un acuerdo de colaboración institucional con el Gobierno de Cantabria, firmado por el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, el regionalista Javier López Marcano (hoy los es de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio) y en presencia de quien era, y es, presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, secretario general del PRC.

Según la versión aportada por Mayoralas, tras ello, Celtus Gestora empezó a plasmar técnicamente la memoria y el desarrollo para la construcción y Celtus Inversión creó el plan para inversores –unos 600 millones–.

Ha relatado que «todo iba aparentemente bien» y fue entonces cuando, según ha indicado, apareció Chauffleur y «convenció» al antiguo director general de Celtus, Gerardo Piñeiro, de que tenía «conocimientos y relaciones para poder conseguir a estos inversores» y «abusando de la confianza», creó una empresa, «plagió» el proyecto y, junto con otra «empresa fantasma», convencieron al Gobierno de que ellos eran los propietarios del proyecto y tenían el capital necesario para desarrollarlo, consiguiendo de esta manera el apoyo del Gobierno.

Mayoralas ha relatado que Celtus, «intentó por todos los medios, convencer al Gobierno de que los únicos que podrían realizar el proyecto serían los empresarios cántabros».

Sin embargo, culpa al Gobierno de Cantabria «apoyar en su momento a quien no debía, facilitándoles con su colaboración, el poder estafar a diversos empresarios».

«Ante la impotencia de recuperar lo que era nuestro, decidimos apartarnos y esperar acontecimientos. De esta manera, pasaron los años y al final entendí que para poder llevar toda la estafa adelante tuvieron que intervenir diferentes actores», ha indicado.

Sin embargo cree que «la espera ha merecido la pena y, en este caso, el tiempo han puesto las cosas y a las personas en su lugar». «Sigo apostando fielmente por Cantabria y por los empresarios cántabros que confiaron en mí y pienso contar de nuevo con su apoyo para desarrollar finalmente este prometedor e ingenioso proyecto», ha afirmado.