El Gobierno remite el decreto del SMI a información pública hasta el 9 de febrero

El Ministerio de Trabajo y Economía Social ha remitido esta semana el texto del Real Decreto del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) para 2023 y la Memoria de Análisis de Impacto Normativo a los trámites de audiencia e información pública, que permanecerán abiertos hasta el jueves 9 de febrero.

Con estos plazos, el Consejo de Ministros aprobará el SMI, como pronto, a partir del martes 14 de febrero, según fuentes de la cartera que dirige Yolanda Díaz, consultadas por Europa Press. No obstante, tendrá efecto retroactivo desde el 1 de enero de 2023.

La propia Díaz y los secretarios generales de CC.OO., Unai Sordo, y UGT, Pepe Álvarez, desbloquearon la tarde del martes las conversaciones del SMI, después de que la reunión previa entre los negociadores del Ministerio y los sindicatos, esa misma mañana, concluyeran sin avances relevantes y con la ausencia de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), como ya ocurrió en diciembre, cuando remitieron su propuesta por escrito.

Díaz, Sordo y Álvarez acordaron incrementar el SMI de 2023 un 8%, de manera que quedará en 1.080 euros en 14 pagas. El anuncio lo hizo poco después en el Senado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuyo compromiso de esta legislatura era fijar el SMI de 2023 en el 60% del salario medio español.

El texto del real decreto y la Memoria de Análisis de Impacto Normativo reflejan que el SMI será de 15.120 euros anuales, 1.080 euros al mes y 36 euros al día.

En el caso de los trabajadores eventuales y temporeros cuyos servicios a una misma empresa no excedan de 120 días, la cuantía del salario no podrá ser inferior a los 51,15 euros por jornada legal en actividad.

Para los empleados de hogar que trabajen por hora, la hora trabajada se pagará en 2023 a 8,45 euros, resultado de incluir todos los conceptos retributivos, gratificaciones extraordinarias, descansos y vacaciones.

SUBIDA DEL 8%, POR DEBAJO DE LA BANDA ALTA DE LAS RECOMENDACIONES

El Ministerio de Trabajo y Economía Social presentó el 19 de diciembre los resultados del informe de la Comisión de Expertos consultados sobre la subida del SMI. El documento planteaba una horquilla de subidas de entre el 4,6%, en su banda más baja, y del 8,2%, en la alta, que se traduce en cifras de entre 1.046 euros y 1.082 euros.

Tras hacer públicas las conclusiones del informe, Trabajo convocó a los agentes sociales a la mesa de diálogo el 21 de diciembre. UGT llegó con la petición de elevar el SMI a los 1.100 euros, mientras que CC.OO. se movía entre esos 1.082 euros de la banda alta y los 1.100 euros.

La CEOE no acudió a la cita, pero remitió un documento a la mesa en el que planteaba una subida del 4% para el SMI de 2023 y pedía que se revisara la situación del campo y los contratos de las empresas privadas con las administraciones públicas.

La negociación del 21 de diciembre terminó sin resultados y, desde esa fecha, los agentes sociales, tanto los sindicatos como la patronal, urgieron a Díaz a fijar una cantidad para el SMI, ya que ellos ya habían cumplido con el papel consultivo que les otorga el artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores.

Más de un mes después de esa primera reunión, Trabajo volvió a citar a los agentes sociales este martes, 31 de diciembre, y se encontró una vez más con la ausencia de la CEOE. Esta vez, su presidente, Antonio Garamendi, alegó que el Gobierno no había respondido de manera formal a sus propuestas y receló del informe de la comisión de expertos como único planteamiento del Ejecutivo.

Pese a la ausencia de la CEOE, el Gobierno y los sindicatos acordaron dejar el SMI de 2023 en 1.080 euros, ligeramente por debajo de las reclamaciones sindicales. No obstante, en los últimos meses tanto Díaz como los secretarios generales de los dos sindicatos han dejado la puerta abierta a una revisión del SMI a mitad de año, para adecuarlo a la evolución de los precios, si bien Álvarez aseguró que esta cuestión no estuvo presente en la negociación.

Este incremento del 8% es el más alto desde 2019, cuando el Gobierno revalorizó esta renta mínima en un 22,3%. En 2020, la subida fue del 5,6% y se prorrogó durante 2021, hasta que en septiembre de ese año se aprobó un nuevo alza del 1,6%, de aplicación a partir del 1 de ese mes hasta el 31 de diciembre de 2021. En 2022, el SMI tuvo un incremento del 3,6%, y estuvo en 1.000 euros en 14 pagas.

La Memoria de Análisis de Impacto Normativo señala que el SMI se ha incrementado en mayor medida que el salario medio y que el salario mediano, tanto antes de la crisis financiera como desde aquel momento.

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