El Gobierno de Ecuador defiende la bajada de impuestos para activar al tejido productivo del país
El ministro de Economía y Finanzas de Ecuador, Pablo Arosemena, ha defendido las bajadas de impuestos aplicadas en los últimos meses por el Gobierno ecuatoriano ya que supone «activar» el tejido productivo y mantener el consumo de los hogares.
En una entrevista en Telerama, Arosemena ha asegurado que Ecuador tiene «estabilidad tributaria» ya que los impuestos solo se modifican para su reducción, al mismo tiempo que ha aumentado la recaudación fiscal en el país con motivo de la mejora de las ventas en todos los sectores de la economía.
«Nuestro objetivo es arrancar el año 2023 metiendo dinero en el bolsillo de los ecuatorianos y, de esta manera, confiar en que sean los habitantes quienes reactiven el consumo final», ha expresado.
En este sentido, el ministro ha resaltado como una medida positiva la reducción del IVA al turismo aprobada hace dos semanas por el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, ya que permite mantener la actividad económica de este sector y que la población pueda planificar sus viajes.
SÍNTOMAS POSITIVOS PARA AFRONTAR 2023
El crecimiento de las ventas de todos los sectores de la economía supone un «síntoma positivo» para la economía y que permite a Ecuador afrontar el año 2023 con optimismo. «No significa que todos los problemas estén resueltos pero podemos decir que tenemos una microeconomía reactivada y una macroeconomía ordenada», ha afirmado.
Sobre esta segunda cuestión, el ministro ha indicado que Ecuador es uno de los países con la inflación más baja y ha puesto en valor la reducción de la ratio entre deuda y PIB, aunque el país continúa teniendo déficit fiscal «por errores de gobiernos del pasado».
Asimismo, en lo que se refiere al crecimiento, Arosemena ha rechazado que Ecuador vaya a entrar en recesión, sino todo lo contrario, puesto que ha recordado que el país crecerá por encima de la media de América Latina según el Fondo Monetario Internacional (FMI) o el Banco Mundial.
Con todo, para Ecuador será «un año duro» ya que los principales socios comerciales del país se enfrentarán a una situación económica complicada, como es el caso de la Unión Europea o Estados Unidos.
En este contexto, el ministro ha señalado que es más necesario que nunca contar con inversión extranjera, para lo que el país está preparado por su política de reactivación económica y sus medidas fiscales, así como apostar por la firma de acuerdos comerciales, que permiten dar impulso a importantes sectores productivos del país.
