Cantabria estudiará instalar de cámaras de videovigilancia en municipios en riesgo de despoblamiento
El Gobierno de Cantabria estudiará un proyecto de instalación de cámaras de videovigilancia en municipios en riesgo de despoblamiento, con el fin de incrementar la seguridad y la atención de distintas emergencias.
Estos sistemas se instalan en las entradas de los municipios y están comunicados con la Guardia Civil, almacenando incluso durante un tiempo las grabaciones, lo que ha ayudado en muchas ocasiones a la resolución de emergencias, robos o a evitar otros delitos, y también al control de incendios e inundaciones, ha explicado el Ejecutivo en nota de prensa.
La consejera de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior, Paula Fernández, se ha reunido con el alcalde de Peñarrubia, Secundino Caso, para analizar este proyecto que el Gobierno presentará en la próxima reunión del Conejo Asesor, el órgano encargado de diseñar, centralizar y desarrollar las medidas y estrategias destinadas a atajar el problema del despoblamiento.
Fernández ha avanzado que se analizará la adecuación del proyecto al mapa de los 39 municipios en riesgo de despoblamiento, si bien ha valorado su idoneidad sobre todo en zonas aisladas y de montaña de la región, con menos habitantes y peores accesos, donde la Guardia Civil y el resto de servicios de seguridad y emergencias incrementan sus tiempos de respuesta.
En este sentido, ha valorado la mejora de la seguridad para evitar delitos y facilitar la intervención de la Guardia Civil, pero, también, reducir los tiempos de respuesta de los servicios de rescate y de bomberos ante incendios o personas extraviadas.
«Con este sistema, que no tiene un elevado coste, los vecinos de los pueblos pueden estar más tranquilos», ha señalado la consejera, quien, además, ha adelantado que Cantabria propondrá la financiación del proyecto con recursos del Ministerio para el Reto Demográfico.
El alcalde de Peñarrubia, por su parte, ha valorado el alcance de esta iniciativa, que ya se ha desarrollado con éxito en otros lugares de España, como es el caso de municipios despoblados de Castilla La Mancha.
«Los beneficios están claros para un mundo rural que carece de servicios de seguridad, con pocos agentes de la Guardia Civil para zonas muy amplias que atender», lo que supone, a su juicio, un «hándicap» para que nuevas personas decidan residir en estos lugares, ha señalado Caso, que ha enfrentado esta situación de «déficit» de los pueblos despoblados con la de las ciudades, que cuentan con policías locales y nacionales e, incluso, Guardia Civil.
Ha detallado que las cámaras instaladas a la entrada de los pueblos enfocan «hacia fuera», disponen de un lector de matrículas y «están teniendo mucha aceptación» entre los residentes en aquellos municipios que lo han decidido instalar.
La repercusión de este proyecto pionero puede ser «muy favorable» para incentivar la llegada de nuevos pobladores, ha destacado el alcalde, porque, en su opinión, la seguridad es una de las cuestiones más importantes para decidir residir en un lugar.
Este sistema «puede ser una ventaja» para ello y, también, para obtener otros datos interesantes en otros ámbitos de actuación a la hora de contabilizar el número de accesos de vehículos, el control de incendios, etcétera, ha concluido.